PHILIP SEYMOUR HOFFMAN, EL ÚLTIMO CAMALEÓN
01/02/2014
HAPPINESS (1998)
La perturbadora película de Todd Solonz constituyó su consagración como uno de los mejores actores de su generación y le supuso sus primeros premios importantes. Encarnaba a Allen, un pobre diablo atormentado por el deseo que experimenta hacia una de las tres hermanas protagonistas del film, incapaz de contener sus emociones y apetitos sexuales. El actor supo imprimir al personaje los matices necesarios para que no resultara grotesco y sí patéticamente humano.