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La asociación estudiantil ha realizado una apuesta fuerte en la UPV, cuyas elecciones a Juntas de Centro se celebraban este miércoles

VALENCIA. El Bloc d'Estudiants Agermanats (BEA), la asociación estudiantil afín a Compromís, ha decidido desembarcar definitivamente en todas las universidades públicas valencianas. A pesar de que su territorio es la Universitat de València, como ya demostraron en las últimas elecciones al Claustro, recientemente se han configurado en la Universitat Politécnica de Valencia y en la Universitat Jaume I de Castellón, y hace dos semanas aterrizaron en la Universidad de Alicante y en la Miguel Hernández.

La asociación quiere estar presente en todas las universidades, a pesar de que en algunas, como la Universitat Politécnica de València (UPV), no están reconocidos los sindicatos estudiantiles como tal. Este miércoles se ha celebrado la elección a las Juntas de Centros y aunque los candidatos se postulan a título individual, más de una quincena de miembros del BEA se presentaban para se escogidos como representantes en los órganos. 

Otras organizaciones estudiantiles, como Campus Jove, tienen a algunos representantes pero no han apostado por constituirse como asociación dentro de la UPV por no ser reconocidos. Sin embargo, el BEA ya ha instalado 'stands' para apoyar y denunciar algunas causas, como hace unos días, por la lucha contra la violencia de género, además de realizar numerosas actividades. 

"Es un proyecto que llevamos varios años intentando llevar a cabo, y hay mucha motivación interna" explica la coordinadora general de la asociación, Laura Peris. "Este proyecto lo hemos cerrado este año, y el año que viene también llegaremos a los institutos" apunta. De momento, se están haciendo notar para reunir apoyos con el boca a boca, las redes sociales y la información en las propias universidades.

Desde las redes sociales, la asociación pone el foco de los alumnos del resto de universidades públicas de la Comunitat en las actividades realizadas en la Universitat de València, donde el pasado 21 de noviembre consiguieron la máxima representación, 27 claustrales, seguido muy de lejos por Campus Jove, con 15. 

Mientras el BEA sigue expandiendo sus miras, la relación entre la segunda asociación estudiantil mayoritaria, Campus Jove, y el impulsor de la misma, Joves Socialistes, se sigue tensando. El deseo de los primeros en mantener independencia sobre los segundos ha provocado diferentes desencuentros entre ambas organizaciones. De hecho, el terreno ganado por la asociación nacionalista preocupa, lo que llevó a Joves Socialistas a pensar en constituir antes de las elecciones una organización estudiantil independiente para tomar las riendas en el mundo universitario de forma directa.

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