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VALENCIA (EFE). La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, confía en que el planeamiento urbanístico de la Marina Real Juan Carlos I, en fase de exposición pública, se debata en el pleno de diciembre y sea aprobado definitivamente por la Generalitat en el primer trimestre de 2014 para poder comenzar las licitaciones.

Barberá ha hecho estas manifestaciones durante una visita a la exposición del plan urbanístico de la Marina Real, ubicado en el edificio Veles e Vents, en la que ha estado acompañada del arquitecto del proyecto, José María Lozano, y de los concejales de Urbanismo, Alfonso Novo, y Deportes, Cristóbal Grau.

La alcaldesa ha asegurado que, una vez se despachen las alegaciones, "se va a intentar" que el plan se presente en el pleno de diciembre para su debate y aprobación.

"Espero que en el primer trimestre del año que viene esté aprobado definitivamente por la Generalitat y poder sacar todos los pliegos y licitaciones", ha apuntado.

La alcaldesa ha invitado a los valencianos a acudir a la exposición a conocer el planeamiento y ha defendido "la voluntad participativa" que ha presidido su elaboración.

Barberá ha asegurado que se trata de un plan "respetuoso con el entorno y el uso de los ciudadanos, integrado en la ciudad e integrador, sostenible y a la ver capaz de crear oportunidades y dinamizar la economía".

Ha recordado que el planeamiento trabaja sobre 586.000 metros cuadrados, de los cuales "la mayoría son de uso público y disfrute de los ciudadanos", con 102.000 metros cuadrados de suelo viario, 240.000 de libre edificación y casi 23.000 de zonas verdes.

Tendrá un uso global terciario, industrial, dotacional, comercial, recreativo y hotelero, compatible con oficinas y aparcamiento -se prevén casi 1.500 plazas- y según Barberá, el "protagonismo será de los ciudadanos y de los edificios protegidos".

Ha recordado que el plan de la Marina contempla usos náuticos y de su industria auxiliar, deportivo y tecnológico y que la zona dispondrá de un gran jardín entre el mar y los tinglados 4 y 5 y la antigua estación y un pequeño bosque mediterráneo frente a la bocana "de forma que reciba a las embarcaciones".

Barberá ha asegurado que la edificación es la mínima, un 17 %, correspondiente a los edificios protegidos y al hotel que se pueda hacer y ha apuntado que a ella le "gustaría" que hubiera vivienda "donde debe estar, no donde no parece lógico que pueda estar".

Sobre si la solución para que haya viviendas que puedan dar vida al barrio durante todo el día pasa por una cesión y por cambiar la normativa de Puertos para permitir su construcción, ha respondido un rotundo "sí".

"Buscaremos el lugar donde hacer las casitas", ha apuntado Barberá, quien ha incidido en la "buena comunicación" de la Marina Real tanto en metro como en autobús y ha resaltado que "desde el Bioparc hasta la punta del espigón se puede venir en bicicleta". EFE