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VALENCIA. Un año se cumplirá el viernes desde que el futuro de la Fundación Bancaja quedara en manos del conseller de Justicia, Serafín Castellano. Doce meses sin que el responsable de poner en marcha la institución tras la desaparición por ley de la antigua caja de ahorros haya conseguido el objetivo de nombrar al patronato pese a que en repetidas ocasiones ha asegurado que era inminente.

El último episodio de esta historia se produjo el viernes pasado. Castellano había instado al PSPV-PSOE a que diera su lista de nombres con urgencia. El conseller aseguraba que el PP ya tenía a sus candidatos y se pactó un intercambio de listas. Los socialistas, que habían alcanzado un acuerdo con Compromís y con Esquerra Unida para repartirse los cinco patronos, entregaron su propuesta. Pero Castellano hizo un quiebro y no presentó la suya.

Algunas fuentes política apuntan a que el PP no ha logrado consensuar a sus candidatos y que incluso habría debate entre el propio Castellano y la consejera de Cultura, María José Catalá, que habría reclamado su cuota al considerar que el objeto social de la fundación se ajusta a sus competencias.  

Esta situación ha creado malestar en las filas socialistas, que siguen esperando a que Castellano cumpla y dé a conocer a qué personas propone para los siete puestos que le corresponden, según el acuerdo, en la futura Fundación Bancaja. Distintas fuentes consultadas por ValenciaPlaza.com apuntan a que la intención de la actual gestora, tras meses esperando, era convocar para el próximo viernes una reunión en la que se daría el visto bueno a los 12 miembros del patronato, entre los que estará el nuevo presidente.

Sin embargo, a tres días vista de esa fecha el PP sigue sin presentar a sus candidatos, con lo que las posibilidades de que este viernes se pueda resolver finalmente el enredo del nuevo ente directivo de la Fundación Bancaja se diluyen.

LOS PERFILES DE LA OPOSICIÓN

El acuerdo verbal que habían alcanzado PP y PSPV-PSOE era que los nuevos patronos de la fundación no tenían que ser políticos y que debían volcarse en la actividad de la entidad, centrada en las ayudas sociales y en la cultura y que en ningún caso se optase por los actuales miembros de la gestora de la fundación. Los socialistas han pedido en repetidas ocasiones al PP que entregase su lista o, al menos, explicase el perfil de sus candidatos y diese el nombre del presidente. Era una condición casi previa a la presentación de su lista, o al menos simultánea.

Pero ni una cosa ni otra. Cuando el viernes los tres partidos de la oposición, a través del diputado socialista Julián López, entregaron su listado de candidatos a Castellano, el consejero no mostró ninguna intención de dar la suya.

La lista de la oposición está integrada por Ana María Escrihuela, licenciada en Psicología y experta en cooperación internacional, Rosa María Yagüe, secretaria de la Facultad de Economía de la Universitat de València, el empresario Emiliano García Domene, empresario y propietario de la Bodega Casa Montaña, el vicepresidente de la Fundación Mundo 21 y exdirector de Acnur, Francisco Javier Edo, y Vicent Palacios, histórico secretario del consejo de Bancaja y, en la actualidad, patrono de la fundación. La primera es a propuesta de EUPV, la segunda de Compromís y los tres últimos del PSPV-PSOE.

Los candidatos de la oposición han aceptado el puesto a condición de no ser unos patronos comparsa y de ejercer corresponsablemente la gestión de la entidad.