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VALENCIA. El proceso de lanzamiento de la antigua Ciudad Ros Casares, que asumió hace unos meses SabadellCAM, sigue adelante. Aunque los equipos de la entidad y su división inmobiliaria, Solvia, están ultimado la estrategia de recomercialización bajo la marca de Ciudad Gran Turia, lo que ya se ha fijado es la fecha de inicio de la campaña de venta.

La entidad ha programado el comienzo de la comercialización a mediados del mes de noviembre, una vez que cuente con todos los parabienes necesarios, según fuentes conocedoras del proceso. Una de las claves de este proceso es la definición de los precios con los que se pretende salir al mercado, no sólo para la propia entidad sino también para la competencia.

En un sector tan gravemente golpeado por la crisis como el inmobiliario, las oficinas están siendo un refugio, dentro de las limitaciones del negocio. Sin embargo, los clientes no quieren ubicarse en cualquier sitio, sino que están orientándose principalmente hacia el centro.

UN PRECIO DE REFERENCIA

El previsible atractivo que genere la comercialización de la Ciudad Gran Turia por parte de SabadellCAM, por las consiguientes ventajas que en materia de crédito se prevén, no sólo puede reorientar la demanda de oficinas en Valencia sino que, lo que es casi más importante, definirá un precio para este tipo de producto en la periferia de la ciudad.

Actualmente, la inexistencia de una demanda suficiente ha dejado sin referencias a los comercialiazadores y a los interesados en este tipo productos. Fuentes del negocio inmobiliario temen que la entidad opte por una agresiva estrategia de precios, como ha hecho en sus productos vacacionales, y reduzca significativamente las expectativas de otros propietarios en otras zonas.