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CASTELLÓN (EP). El empresario Vicente Vilar ha declarado este jueves que la querella que presentó contra Carlos Fabra en 2003, en la que acusaba al exdirigente del PP de cobrarle dinero a cambio de mediar para favorecer a su empresa y que ha dado lugar al proceso que se enjuicia en estos momentos, responde a que no le apoyó cuando su exmujer, Montserrat Vives, le denunció por la violación por la que fue condenado.

En la segunda jornada del juicio, tras ser preguntado por su abogado sobre si presentó la querella por venganza, ha asegurado: "no, fue porque parece mentira que, conociéndome, Carlos Fabra no me apoyara", y ha aclarado que cuando su exmujer le denunció por violación y le amenazó con quedarse "con todo", llamó al expresidente de la Diputación, quien no le contestó. Vilar le envió un mensaje en el que le decía: "Carlos vas a por mí, yo voy a ir a por ti".

"Yo no denuncio esto para fastidiar a Carlos Fabra, sino para que la Justicia tuviese en cuenta todo que había pasado en torno a la denuncia de la violación, por lo que no voy a meter a Carlos en un lío que no se merece", ha declarado Vilar, quien ha reconocido que la afirmación que realizó en una carta que remitió al exdirigente 'popular' y que se le ha exhibido en la sala respecto a que éste había cobrado muchos millones por tráfico de influencias "no es verdad".

Vicente Vilar ha asegurado, por otra parte, que "nunca" le dio dinero a Carlos Fabra, aunque sí ha reconocido que su exmujer le dio "pasta" a la exesposa del expresidente de la Diputación "cuando tocaba y cuando no tocaba también".

Así, ha declarado que su exmujer realizó dos entregas de dinero a la exesposa de Fabra de 30 y 25 millones de las antiguas pesetas, de los que parte correspondían a "dinero negro" de Naranjax. Al respecto, ha manifestado que la primera se realizó en el salón de la propia empresa y la segunda en bolsas de comida, en Oropesa. Preguntado a qué respondían esos pagos, ha apuntado que eran en muestra de "agradecimiento".

En un momento de su declaración, ha resaltado que se trata de un tema "de dos mujeres codiciosas", una de ellas --su exesposa-- "que me denuncia por violación, falseando totalmente la fistoria y se me sentencia por su palabra contra la mía, diciendo que la dejé sin nada, y eso es falso y yo no debería estar en la cárcel".

Por otra parte, el empresario, que ha contestado a las preguntas de todas las partes, ha explicado que contactó con el exsenador del PP y también acusado, Miguel Prim, al que le expuso los problemas existentes en la concesión de licencias para la comercialización de productos fitosanitarios. Posteriormente, según Vilar, Carlos Fabra le dijo que Prim le había "puesto al día" y que se ofrecía a ayudarle y a realizar gestiones, la primera de ellas para conseguir el registro de uno de los productos.

REUNIÓN EN AGRICULTURA

A tal efecto, según ha afirmado, Carlos Fabra mantuvo una reunión con el entonces ministro de Agricultura, Jesús Posadas, junto al exsecretario de Estado de Hacienda, Juan Costa, a Miguel Prim y al en ese momento diputado del PP Juan José Ortiz, tras la cual, éste último le llamó para informarle de que el ministro había dicho que el producto estaba "perfecto" y que tenía "luz verde" para poder venderlo.

Sin embargo, el empresario ha explicado que "no sé más de la reunión, pero tengo muy claro que se nos concedió no por influencia, sino simplemente porque estaban todos los documentos que acreditaban que al producto le correspondía el registro". Vilar ha apuntado que una semana después de conseguir el registro de este producto, se realizó el primer pago de 30 millones de pesetas por parte de su exmujer a Amparo Fernández.

"HARTO DE SOLTAR MALETINES"

En otro momento de su declaración, Vilar ha reconocido que le dijo a Carlos Fabra y "a más gente" que estaba "harto de soltar maletines por el Ministerio, "pues hay una serie de despachos de influencia que elaboran memorias técnicas sacadas de internet, que si no se presentan a través de estos intermediarios, no se consiguen las autorizaciones". "No se sabe a quién van esos maletines, pero la autorización llega, ha aclarado.

Asimismo, Vilar ha hecho referencia en su declaración a otra reunión en la que acompañó a Carlos Fabra a ver a la exministra de Sanidad Celia Villalobos para explicarle los retrasos que sufrían las autorizaciones para los fitosanitarios. "Todo lo que me dijo Carlos Fabra previamente que no dijera a la ministra, se lo dijo él, incluido que tenía una pandilla de sinvergüenzas, por lo que ésta nos sacó del despacho sin dejarnos decir ni mu", ha declarado.

Por otro lado, Vilar ha negado que los pagos realizados a la empresa Carmacas --participada por Carlos Fabra y su exposa-- por parte de Artemis 2000 correspondieran con trabajos realizados, y ha añadido que no sabe por qué se hicieron. Además, ha asegurado que "nunca" pactó con el exdirigente del PP pagarle por asesoramiento.

En cuanto a Artemis 2000, empresa que adquirieron las exmujeres de Fabra y Vilar, el empresaria ha reseñado que "nunca" llegó a tener actividad, y que le nombraron a administrador de la misma "porque era el único que sabía de los temas y que tenía contactos".

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