LUIS A. TORRALBA. 07/06/2013 Los altos patrimonios recuperan su confianza en estos vehículos de inversión denostados por muchos por su laxo tratamiento, cuyo número de altas supera al de bajas en lo que va de ejercicio. Una circunstancia que no se producía en los últimos años ante la menor presión fiscal, regulatoria y social

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VALENCIA (VP). Las sociedades de inversión de capital variable, las populares sicav, han invertido la tendencia bajista de años anteriores provocada principalmente por la incertidumbre en materia de fiscalidad y regulación que pesaba sobre ellas en los últimos tiempos, amén del descontento social.

De hecho, y con datos oficiales de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), en lo que va de año se han constituido más que las que han causado baja, al contrario de lo que venía sucediendo. Así, en los seis primeros meses del año han visto la luz 38 nuevos vehículos enfocados hacia los grandes patrimonios frente a los 23 que pasaron a mejor vida.

Unos datos que contrastan con las 16 altas y 39 bajas que se produjeron en el mismo periodo de tiempo de 2012, según la información recogida de la base de datos pública del organismo supervisor.

PUNTO DE INFLEXIÓN

Para Iñigo Susaeta, socio fundador de Arcano, "estamos en un punto de inflexión donde las nuevas medidas de fiscalidad del ahorro del Gobierno han resultado un balón de oxígeno para las sicav, dado que no les han afectado frenando así los temores que amenazaban sobre ellas para verse penalizadas".

Conviene recordar en este sentido que se ha pasado del 18% al 21% en los impuestos sobre el rendimiento de capital, según las últimas reformas que llevó a cabo el Ejecutivo de Rajoy; mientras que la amnistía fiscal también ha facilitado que algunos con dinero en el extranjero lo hayan traído a España montando una sicav para aprovechar su laxo tratamiento fiscal.

NÚMERO EN AUMENTO

"La figura de las sicav tiene mucho sentido y actualmente hay liquidez suficiente para que lo sigan teniendo", añade Susaeta, que considera que el número de estas sociedades irá en aumento en los próximos meses. De este modo, poco a poco se irán recuperando después de haber reducido su número a niveles de 2004, tal y como publicó este diario el verano pasado.

Actualmente el número de estas peculiares sociedades se sitúa en los 2.992, según los datos recogidos ayer por la tarde de la web de la institución que preside Elvira Rodríguez.

BANCA PRIVADA

Una cifra que dista muy lejos de las cerca de 3.400 que circulaban por España al cierre del inicio de la crisis (2008) y supone perder la psicológica cota de las 3.000 que venía manteniendo a buen recaudo en los últimos años. 

José Manuel García, director de Zona Levante de ATL Capital Gestión de Patrimonios, considera que "este año está siendo muy bueno para la banca privada por la caída de las rentabilidades de los depósitos y la mejora de la situación de los mercados, lo que está aumentando el riesgo de los clientes de banca privada y es ésta la que nutre a las sicav".

EL MEJOR VEHÍCULO PARA GRANDES PATRIMONIOS

García, que reconoce que la banca privada "es la primera en sufrir la crisis y la primera en salir de ella", también considera que "el haberse disipado las dudas sobre la fiscalidad y regulación de las sicav juega a favor de estas sociedades que siguen siendo el mejor vehículo para los grandes patrimonios después de una brutal liquidación en años anteriores producto de la crisis".

Sin embargo, no todos están a favor de las sicav y ahí está el caso del Sindicato de Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha).

HACIENDA, AL ACECHO

Hace un año propusieron una 'reconversión' para evitar los abusos en las figuras de los 'mariachis' o inversores de paja que sólo sirven para alcanzar el mínimo legal de la centena.

Dicho sindicato recomendaban convertir una institución de inversión colectiva (IIC) en otra de inversión privada, por lo que habría que modificar la ley de IIC.

Para ello aconsejaban incluir un nuevo requisito que estableciera un límite máximo en el porcentaje de participación en una sicav entre el 2% y el 5% del capital social máximo de la sociedad fijado estatutariamente.

DURAMENTE CASTIGADAS POR LA CRISIS

Sin embargo, y de momento, la cosa no ha cuajado y no tiene visos que lo haga dentro de la nueva reforma que está preparando el Gobierno y que se centrará tanto en el IRPF como en el Impuesto de Sociedades para que el país se equipare a los tipos impositivos de Alemania y los países nórdicos.

Pero lo que es un hecho es que en lo que va de año se ha incrementado el número de unas sociedades duramente castigadas ante el cierre obligado de muchas de ellas.

CAMINO DE LUXEMBURGO

Una circunstancia dada por las necesidades de liquidez de sus dueños ante la ausencia de alternativas de financiación.

Por no hablar de la domiciliación en otros países en busca de mayor tranquilidad como Luxemburgo. 

Además, el hecho de que ya no despierten tanta antipatía como antaño y que sus dueños se hayan hecho la idea de que están a expensas de cualquiera que quiera consultar quién hay detrás -basta con acudir a la web de la CNMV- también han obrado a favor de estas sociedades de inversión de capital variable, todas ellas debidamente registradas y que han sufrido la crisis como el que más de los mortales.