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MADRID. La matriz del grupo Iberia no ha contratado ningún piloto desde 2004, según los datos a los que ha tenido acceso Valenciaplaza.com. Desde entonces, el aumento del número de pilotos se ha producido en las filiales del grupo, sobre todo en Vueling y antes en Clickair, que cuenta con una plantilla de pilotos del entorno de 500 y más recientemente en Iberia Express, que opera desde hace menos de un año y donde suman algo más de 100 pilotos, sin contar los de la franquiciada Air Nostrum. El pico de pilotos contratados en Iberia fue de cerca de los 2.100 y se produjo antes de 2004, según las mismas fuentes.

Estas cifras dan una idea bastante clara del actual conflicto que enfrenta a la dirección con sus pilotos integrados en la sección sindical del Sepla en Iberia. Conflicto que ayer volvió a ponerse de manifiesto ante la imposibilidad de que los pilotos se integrasen con el resto de sindicatos, el 93% de la plantilla, en las mesas de negociación del llamado Plan de Transformación, lo que puede condicionar todo el proceso negociador.

EL MISMO CONFLICTO DE SIEMPRE

La dirección cree que es imposible la viabilidad de la compañía si no logra aumentos de productividad de sus pilotos, para lo que se creó en su momento Clickair, luego fusionada por Vueling, y posteriormente Iberia Express. El Sepla rechaza este argumento y culpa a la dirección de estar entregando la aerolínea a British Airways (BA) en el proceso de integración en IAG. Es el mismo conflicto que lleva años enfrentando a los pilotos con las sucesivas direcciones de Iberia, sólo que ahora hay nuevos elementos como la fusión con BA.

Este nuevo conflicto abierto con los pilotos es uno de los capítulos finales de la gran reestructuración planteada en Iberia. El proceso pretende reducir 4.500 puestos de trabajo, aunque 3.000 podrían ser prejubilaciones por un ERE vigente, y una nueva política comercial con cierre de algunas rutas y apertura de otras. El objetivo de la dirección es que la aerolínea vuelva a la senda de los beneficios en tres años tras remontar 260 millones en números rojos.

SIN ACUERDO POSIBLE

Después de una semana enviándose faxes con las propuestas y contrapropuestas entre la dirección del grupo presidido por Antonio Vázquez y la sección sindical del Sepla en Iberia que encabeza, Justo Peral, para intentar integrar al colectivo de pilotos con elresto de sindicatos para la negociación del Plan de Transformación, ayer se rompió esta negociación, pese a que según el Sepla un fax de la empresa el pasado 24 de diciembre les hizo albergar esperanzas de que Iberia aceptaría incluir en el texto del acuerdo los conceptos de "plan de crecimiento y de recuperar actividad".

La dirección por su parte dice que en el texto acordado con el resto de sindicatos para abrir las mesas de negociación están recogidos esos conceptos, pero acusa a los pilotos de no querer apuntarse, por lo que les convocará mañana mismo pero para negociar directamente los 530 despidos de pilotos que prevé el Plan de Transformación, así como rebajas salariales.

Precisamente este miércoles se hizo público, tras avanzarlo dos medios de comunicación, el nuevo laudo arbitral entre el Sepla y la dirección de Iberia emitido por el catedrático Jaime Montalvo tras el defecto de forma denunciado y ganado por Iberia. Y el nuevo texto, aunque impone concesiones salariales y de productividad a los pilotos, mantiene la unidad de escalafón entre los pilotos de Iberia y los de Iberia Express, lo que sigue sin gustar a la aerolínea. Los pilotos de nuevo ingreso en Iberia, ya sea la matriz, Express o cualquier filial, será contratados en principio por Iberia Operadora, con la participación de la nueva filial de corto y medio radio en el correspondiente proceso, e integrados en el escalafón.

El origen del litigio se remonta a la creación a finales del pasado año de la nueva filial de Iberia para el corto y medio radio, Iberia Express, que desembocó en 18 jornadas de huelga por parte del colectivo de pilotos, ocasionando un impacto de 54 millones de euros de pérdidas para la aerolínea.

RECORTE SALARIAL A LOS NUEVOS PILOTOS

No obstante, el nuevo laudo si incluye algunas modificaciones sobre el anterior. La más relevante es que los nuevos pilotos que se incorporen en Iberia tendrán una reducción salarial del 40% de media, de forma que un copiloto recién incorporado percibirá entre 28.000 y 38.000 euros al año, frente a los 88.000 que cobra actualmente en su nivel más bajo. El tope salarial para los copilotos que operan en Express, con un límite de actividad de 14 años de antigüedad, será de 78.408 euros anuales. El árbitro defiende que si Iberia reduce el número de copilotos en la matriz, al transformarse en pilotos en su paso a Express, y la compañía cubre estas bajas en Iberia con nuevas contrataciones a costes más bajos el ahorro es "muy relevante".

Montalvo, informa EP, reconoce en su nuevo laudo la facultad de Iberia para constituir las empresas que estime convenientes para el mejor desarrollo de su actividad y, en concreto, a Iberia Express como "entidad empresarial con plena autonomía de gestión", pero pone límites a su desarrollo.Concretamente, Iberia Express tendrá que limitar su capacidad al 25% del número total de asientos por kilómetros operados ofertados por la matriz. Asimismo, Express no podrá efectuar rutas de largo radio, que son vuelos de más de seis horas. Asimismo, las escalas de los vuelos se reducen a 35 minutos en el corto y medio radio, lo que lleva consigo un aumento de la carga de trabajo y de las responsabilidades de la tripulación y eleva la productividad.

NO PARECE GUSTAR A NADIE

Ambas partes meditaban ayer sobre el nuevo laudo de Montalvo que analizaban sus respectivos gabinetes jurídicos. El Sepla destacaba las rebajas salariales impuestas a su colectivo, aunque sean los nuevos, y los aumentos de productividad. Por su parte, la dirección de Iberia manifestaba su rechazo a la unidad del escalafón entre Iberia e Iberia Express.

La compañía, que previsiblemente se pronunciará este jueves sobre el laudo, ha sido muy dura contra esta mediación que fue impuesta por el ministerio de Fomento y su titular, Ana Pastor. De hecho, es público que la impugnación del árbitro y el que Iberia ganase el recurso cayó como una bomba en el departamento ministerial.

En una reciente carta enviada al propio Montalvo cuando se supo que éste preparaba el nuevo laudo, Iberia le instó a abstenerse "formalmente" de llevar a cabo“cualquier actuación” arbitral que pretenda dar cumplimiento al fallo de la sentencia de la Audiencia Nacional al considerar que está contaminado y dudar de su imparcialidad. La compañía aérea le recordaba, lo que no se ha cumplido obviamente, que la nulidad de un laudo exige, para que se reproduzca el arbitraje, la renovación del compromiso arbitral entre las partes o, en caso de arbitraje obligatorio, la adopción de un nuevo acuerdo al respecto por el órgano competente. 

También le dejaba constancia expresa de que no reconocía la existencia de mandato arbitral alguno a su favor ya que leconsidera “objetivamente contaminado”, motivo por el que considera que no reúne las condiciones de “imparcialidad y neutralidad”requeridas.