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MANUEL GIL. Según la Generalitat cerró el ejercicio 2009 con un déficit financiero de 87,3 millones de euros, o lo que es lo mismo, el 0,6% del presupuesto definitivo, que ascendió a 15.942 millones de euros. Eso sí, para alcanzar este déficit, la Generalitat ha tenido que recurrir una vez más a la deuda. Casi 2.000 millones de euros. 

Así se desprende de la liquidación de los presupuestos que presentó este viernes el conseller de Economía, Gerardo Camps. Según explicó la evolución de los gastos e ingresos de los capítulos I al VII refleja un saldo negativo de 1.965,6 millones. De ellos, 1.878,3 millones se soportan a través de deuda, lo que se conoce como pasivos financieros, para alcanzar finalmente ese resultado de déficit de financiación de tan sólo 87,3 millones.

El vicepresidente señaló que el Consell ha soportado a duras penas y casi en solitario el coste de la crisis. Para empezar, la recaudación de impuestos se ha desplomado un 17,5%. De 5.197 millones de euros que fueron recaudados en 2008 a los 4.289 millones del pasado 2009.

Además, los planes anticrisis aprobados por el Consell a mitad de año (el conocido como Plan Confianza) han representado 450 millones más de los previstos. Se han desarrollado casi por completo: 330 del capítulo de apoyo a los sectores productivos, algo más de 110 millones del de apoyo a la lucha contra el desempleo, y apenas 9 del de inversiones productivas en los municipios, que tendrá el mayor gasto este 2010.

A esto hay que añadir el incremento del gasto social: sanidad, educación y bienestar social, partidas que han supuesto un incremento del gasto de 1.044 millones en el último ejercicio. En total, esos casi 2.000 millones de euros de déficit que el Consell ha tenido que liquidar vía deuda para acabar con esos apenas 87 millones de déficit.

Según explicó el conseller, este resultado presupuestario supone un -1,86% sobre el PIB de la Comunitat, lo que permite anticipar que la liquidación correspondiente al ejercicio 2009 en términos de Contabilidad Nacional que la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE) practicará en los próximos meses una vez se rinda la Cuenta General de 2009, ofrecerá un déficit mucho menor, entre un 2,5% y un 3%, que el de la Administración Central del Estado, que ya alcanza una previsión para 2009 del -9,5% del PIB nacional.

En cuanto al volumen de impagos al cierre del ejercicio pasado, el conseller señaló que ascendieron a 2.208 millones, 2.916 si se suma lo que se arrastra de años anteriores. Eso sí, según el vicepresidente, esto supone un leve descenso respecto a 2008 y durante el primer mes de este año ya se han satisfecho cerca de 1.000 millones, por lo que "desde luego, que nadie piense en impagos definitivos".