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VALENCIA. El ministro de Fomento y vicesecretario general del PSOE, José Blanco, dejó a propios y extraños boquiabiertos cuando pocos días atrás, anunció en un acto en Mislata que las listas de la formación socialista para el Congreso de los Diputados "no estarían exentas de sorpresas". En el PSPV, todos contaban con que el secretario general, Jorge Alarte, tenía perfiladas las candidaturas sin injerencias -al margen de los compromisos obligados- de la dirección nacional, situada en la calle Ferraz de Madrid.
No obstante, la inquietud en ciertos sectores del socialismo ha crecido en los últimos días tras las palabras de Blanco. A priori, Alarte ya debía cumplimentar el ‘sudoku' de las listas con sumo cuidado para no dañar las sensibilidades -familias- del partido. O eso, o podría encontrarse con un conflicto en plena campaña electoral que, sumado a un posible varapalo en las urnas, dejaría su liderazgo pendiente de un hilo tras el 20-N.
En cuanto a las salidas programadas, se da por sentado que la exvicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega; el portavoz municipal socialista en Valencia, Joan Calabuig, y el periodista Ferran Bono, no repetirán en la candidatura.
A priori, todo apunta a que la lista del PSPV estaría encabezada por la secretaria general del Ministerio de Infraestructuras, Inmaculada Rodríguez Piñero, una dirigente con influencia en Madrid y que ya figuró como número dos en 2008. Parece segura la continuidad del exsecretario de Organización del PSOE, Ciprià Císcar, amigo de Alfredo Pérez Rubalcaba, aunque algunas fuentes opositoras de Jorge Alarte aseguran que el secretario general del PSPV ha tanteado la posibilidad de relevarlo.
Otra de las fijas en la quiniela es la portavoz de campaña del PSPV, Carmen Montón, quien repetiría en la lista dados sus buenos contactos en Madrid y su afinidad al ‘lermismo'.
Con unos últimos sondeos que recortan la representación por Valencia de diputados socialistas en el Congreso a seis (en 2008, fueron siete), los siguientes lugares se reparten entre compromisos de Jorge Alarte. No obstante, no hay sitio para todos, y más aún si Blanco introduce vía Ferraz alguna sorpresa (probablemente mujer en pos de la paridad) en esta circunscripción.
Así, los dirigentes para los puestos restantes serían José Luis Ábalos, Josep Santamaría y Toni Such. La no presencia en la lista de cualquiera de estos nombres puede complicar la situación de Alarte al frente del partido. A no ser que los resultados rocen la excelencia y todos puedan tener un escaño.
José Luis Ábalos sigue siendo uno de los ‘pesos pesados' del socialismo de la ciudad de Valencia, donde controla diversas agrupaciones y cuenta con un importante número de fieles merced a su labor con las bases en la capital. Aunque su dominio no es tan evidente como antaño, un desplante al dirigente le podría costar a Alarte una pérdida de control absoluta en Valencia, puesto que el secretario general de la ciudad, Salvador Broseta, le necesita para ejercer de contrapeso al ‘lermismo' en el ámbito orgánico, que ha incrementado su fuerza en Valencia merced a unas listas municipales en las que quedaron fuertemente representados. De la misma manera, Broseta necesita también el apoyo de Ábalos en el ayuntamiento para que el lermismo no goce de un poder absoluto.
Por otro lado, Toni Such, exportavoz adjunto en Les Corts, fue remitido a un puesto en la lista al Congreso tras ser excluido de la cámara autonómica. Su ausencia molestaría al sector ‘lermista', una situación que podría precipitar la tensión contenida hasta ahora en la formación socialista.
En cuanto a Josep Santamaría, es un dirigente con experiencia en el Congreso que siempre ha estado entre los partidarios de Jorge Alarte. Relegarlo significaría ceder a los contrapesos del partido en vez de premiar a la fidelidad.
En el caso, de que la "sorpresa" fuera por otra circunscripción, sería complicado que liderara la lista, dado que Leire Pajín y Ximo Puig parecen confirmados por Alicante y Castellón respectivamente. Desde el PSPV, se encogen de hombros ante la afirmación de José Blanco aunque la versión oficial es que en Blanquerías "participan de la sorpresa" anunciada por el ministro. Hasta que se desvele, se prevén nervios crecientes y taquicardias agudas en el corazón del PSPV.
Leo en otro medio que el elegido es un tal Gabilondo, ministro de Educación, que acaba de anular la subvención a uno de los pocos centros científicos de calidad que tenemos por aquí. Y cuya relación con Valencia es nula. la noticia dice que se lleva bien con el Alarte, que es un argumento político de gran peso.Ya demostró el PSOE con de la Vega que los cuneros no eran exclusiva del PP que nos va a colocar al condenado por conducir borracho porque es amigo de Rajoy (además de Trillo que s´lo va a Alicante a comer marisco (dicho pro un dirigente del PP). ¿hasta cuando callaremos los valencianos?. Me parece que hasta el día del juicio final.
Afirman medios próximos a Rubalcaba que no va a incluir alcaldes en sus listas. En tal caso, qué hará Puig que lelva en Morella desde que se creó la ciudad
Que mas da lo que haga el ministro Blanco o Blanquerias. El socialismo valenciano esta muerto hace mas de 16 años por su estructura tribal y los valencianos i valencianas miran hacia otra parte. No tenemos solución, los socialistas, claro.
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