04/02/2011 El conseller de Infraestructuras, Mario Flores, critica el nuevo decreto que regula este tipo de instalaciones y exige que no se cambien las reglas del juego

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VALENCIA (EP). El conseller de Infraestructuras y Transporte, Mario Flores, afirmó ayer que las empresas valencianas del sector fotovoltaico van a dejar de facturar 122 millones de euros por la "incertidumbre" que genera el nuevo decreto, que regula este tipo de instalaciones.

Flores se pronunció en estos términos en la inauguración de una planta solar fotovoltaica en el Parque Logístico Valencia, emplazado en término de Riba-roja, donde manifestó que los sucesivos cambios normativos "han reducido en dos ocasiones la venta del precio de la electricidad en un 25 por ciento cada vez".

Para el conseller, "hay que tener en cuenta que las instalaciones de energías renovables son proyectos con fuertes inversiones que precisan importantes volúmenes de financiación y para obtenerla es fundamental una cierta estabilidad regulatoria y por supuesto que no cambien las reglas del juego, especialmente los ingresos que vas a obtener, con carácter retroactivo", añadió.

El Real Decreto Ley 14/2010 aprobado por el Gobierno central para los próximos tres años, que limita la electricidad a facturar tanto de las instalaciones solares fotovoltaicas nuevas como las ya existentes, "se suma a las tres regulaciones con que se ha cambiado el marco regulatorio desde 2008, y siempre en el mismo sentido, reduciendo la rentabilidad de las instalaciones fotovoltaicas, ahora con carácter retroactivo, y poniendo limites al desarrollo de estas instalaciones de energía renovable", indicó el conseller.

"Todo ello provocará la paralización de la financiación de proyectos futuros de instalaciones solares fotovoltaicas", aseveró Flores, quien destacó el apoyo de la Generalitat a los empresarios del sector, "ya que este duro ajuste económico rebaja sobre el 30 por ciento los ingresos a los que tenían derecho por la venta de la electricidad durante los próximos tres años".

La planta solar fotovoltaica de Ribarroja está  situada sobre cubierta de nave industrial de la empresa VCD Logística y cuenta con una potencia de 600 kW. Ha supuesto una inversión de 2,5 millones de euros y generará alrededor de 1.000.000 kWh/año, es decir, el equivalente al consumo de 1.000 personas. Se estima que se evitará la emisión a la atmósfera de 350 toneladas de CO2 al año.

La comarca de El Camp de Túria cuenta con una potencia total en servicio de 10.293 kW, repartidos en un total de 165 instalaciones. "Dicha potencia supone el nueve por ciento de la instalada en toda la provincia de Valencia. Las 165 instalaciones solares fotovoltaicas que existen actualmente en la comarca de Camp de Turia son capaces de abastecer a cerca de 5.000 hogares", explicó.

"VALENTÍA"

El conseller destacó asimismo la "valentía" de las empresas responsables de la planta, VCD y Vaalsol, por acometer el proyecto en este contexto normativo. Flores se refirió también a los avances que está experimentando el Parque Logístico, que cuenta desde el pasado mes de octubre con un nuevo edificio de control para la seguridad del recinto. La Conselleria va a poner en marcha a través de GTP el cerramiento del recinto, con un presupuesto de 1,4 millones de euros.

Infraestructuras tiene ya finalizado, según señaló, el proyecto  de construcción de 30.000 metros cuadrados de naves en alquiler con opción de compra para estimular la implantación de empresas acuciadas por problemas de financiación. La ejecución requerirá una inversión de 11 millones de euros.

También indicó que el próximo mes de marzo se abrirán las plicas del concurso para la construcción de un aparcamiento de 900 plazas dentro del recinto, al que se destinarán 6,5 millones de euros.