Comparte esta noticia

• Tweet
• meneame

Otras noticias

• Economía incumple con Unión Gremial el criterio que aplicó para excluir a Anged del Observatorio
• El 'problema valenciano' se cuela en Madrid
• A quién le sube y a quién le baja los impuestos Joan Ribó

Esta organización política de ámbito nacional, cuyo origen se remonta a principios de los 90 en Valencia, ha apadrinado a responsables de Podemos como Iglesias y Errejón

VALENCIA. En 1993, un grupo de jóvenes profesores universitarios y estudiantes de último año acordaron de manera informal en un bar de Valencia la creación de la Associació Centre d'Estudis Polítics y Socials. Esta organización, dibujada inicialmente con carácter improvisado, era en realidad un proyecto hecho con amplitud de miras y perspectivas de futuro. Entre los impulsores de la iniciativa se encontraba el ahora catedrático de Derecho Constitucional de la Universitat de València Roberto Viciano y el profesor titular de Derecho Constitucional en la UV Rubén Martínez Dalmau, entonces a punto de licenciarse.

En el año 2000, según reflejan en su antigua web -aunque otras fuentes concretan en febrero de 2001-, cuando empiezan a potenciarse los proyectos para colaborar en América Latina, la asociación pasa a convertirse en la Fundación Centro de Estudios Políticos y Sociales (CEPS). La semilla de Podemos.

Esta organización se define a sí misma en su web como "política no partidaria" y dedicada "a la producción de pensamiento crítico y al trabajo cultural e intelectual para fomentar consensos de izquierdas". A CEPS pertenecen, según se refleja en el apartado 'quiénes somos', dos de los máximos dirigentes de Podemos: Pablo Iglesias, secretario general de la citada formación, y su mano derecha, Íñigo Errejón. La fundación, según recalca, ha concentrado su experiencia política en "América Latina, proveyendo consultoría política, jurídica y económico a fuerzas y gobiernos progresistas en la región".

Entre 2006 y 2007, como ha sido publicado en diversos medios de comunicación, Pablo Iglesias trabajó a través de CEPS en asesoramiento para el gobierno venezolano de Hugo Chávez. En aquel momento, el presidente de la fundación era Roberto Viciano y el vicepresidente, Rubén Martínez Dalmau. Un año después, Iglesias se incorporaba a la dirección de la organización.

Por su parte, Íñigo Errejón también actuó de asesor a través de CEPS en América Latina, por ejemplo en la campaña electoral a las elecciones presidenciales en Bolivia en 2009. En ese momento, la presidencia de la fundación había pasado al valenciano Martínez Dalmau, quien contaba de vicepresidente con Alberto Montero, profesor de Economía Política en la Universidad de Málaga, un puesto en la fundación que ostenta ahora de nuevo tras haber pasado por la presidencia. Además, Montero es el encargado de dirigir la investigación de Errejón, una situación que ha causado cierto revuelo estos días sobre si el dirigente de Podemos está incumpliendo o no sus obligaciones laborales.

UNA RELACIÓN ESPECIAL CON VALENCIA

Estas conexiones de los actuales líderes de Podemos con los referentes valencianos de la Fundación CEPS no es baladí dentro de la estrategia de este partido de cara a las próximas elecciones autonómicas y locales. Como ya informó este diario, en la candidatura apadrinada por Iglesias para el Círculo de Valencia hay incluidos varios miembros de la citada organización.

De la misma manera, una de las dos valencianas integrantes en el consejo ciudadano de Podemos en el ámbito nacional es Ángela Ballester, licenciada en Historia y responsable en la CEPS del área de Sensibilización y Cooperación del área de América Latina.

De hecho, fuentes de la formación apuntan a que Ballester sería la preferida por Iglesias y su entorno para convertirse en la próxima secretaria general del partido en la Comunitat Valenciana y candidata a la Generalitat. No obstante, dentro del propio partido y de CEPS, hay voces que están animando a que precisamente referentes con mayor trayectoria y peso político como el citado Martínez Dalmau o Viciano se planteen ser candidatos.

LAS CONEXIONES CON COMPROMÍS Y CON ESQUERRA UNIDA

Una de las líneas en las que se venía trabajando desde Podemos era la de tantear un pacto preelectoral con Compromís. Fuentes vinculadas a ambas formaciones han confirmado a este diario que se produjo semanas atrás un encuentro en Madrid en el que participaron Mònica Oltra e Íñigo Errejón. Mientras que fuentes del entorno de la diputada valenciana señalan que fue una cita "informal" en la que no se abordaron cuestiones electorales, otras personas cercanas a la cúpula de Podemos apuntaron a que no se había avanzado en un posible pacto preelectoral por diferencias estratégicas, pero se había abierto una línea de diálogo para acuerdos tras los comicios, dónde Oltra se perfila, a juicio de las citadas fuentes, como "la más presidenciable por, entre otras cosas, su marcado perfil contra la corrupción".

En este sentido, fuentes del entorno de CEPS señalan que Martínez Dalmau mantiene "muy buena relación" con Oltra dado que han compartido iniciativas políticas desde los año 90, una de las últimas, la que tenía como objetivo impulsar un nuevo proceso constituyente, en la que también coincidía Roberto Viciano. Estos rerferentes de la fundación mantienen sintonía con otros miembros de Compromís, como la exdiputada nacional Isaura Navarro, cercana colaboradora de Oltra, y que también adquirió experiencia en América Latina -concretamente en Venezuela- a través de CEPS.

Además, las fuentes consultadas por este diario apuntan a que la también hay conexiones reseñables de la fundación y, en especial de estos miembros, con Esquerra Unida: por ejemplo, la excandidata al Senado en 2011 y la lista de las europeas por esta formación, Adoración Guamán, profesora de Derecho del Trabajo, ostenta el cargo de secretaria en CEPS. Martínez Dalmau, según apuntan algunos también mantiene buena relación con el candidato de EU Ignacio Blanco.

Así pues, todo apunta a que la línea de Podemos en la Comunitat Valenciana va dirigida a un pacto con Compromís y Esquerra Unida en el que, dependiendo de los resultados, no descartarían ceder la Presidencia de la Generalitat. Una estrategia que también contribuiría al objetivo de salvaguardar la marca del desgaste de un Gobierno autonómico antes de las elecciones generales, objetivo prioritario de Pablo Iglesias. 

Para ello, desde Madrid son conscientes de la utilidad de activos como Viciano, Martínez Dalmau y otros miembros de CEPS en Valencia. Virtudes como el conocimiento del terreno y su experiencia negociadora son valores añadidos para la cúpula de Podemos. La Comunitat es un plaza importante y necesaria de cara a las elecciones generales e Iglesias sabe que algunos de sus antiguos 'mentores' pueden ser buenos puntos de apoyo.

Aunque no todo ha sido de color de rosa en esta relación: "Ha habido diferencias en el pasado y una evolución distinta, pero desde Madrid respetan a los referentes de CEPS en Valencia y van a contar con ellos para que les ayuden a llevar a buen puerto el barco de Podemos en la Comunitat", señala un miembro del partido conocedor de ambas organizaciones.