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VALENCIA (EP/VP). La veintena de business angels de BigBan Angels que formaron el vehículo de coinversión BSF,  ya han escogido el primer proyecto en el que invertir. Este vehículo estaba destinado a entrar en proyectos de la primera edición de Lanzadera, la aceleradora impulsada por Juan Roig, y el primer elegido ha sido Kukupia. El total invertido ha sido de 200.000 euros. 

BSF es un vehículo de inversión compuesto por más de una quincena de empresarios valencianos businness angels, creado desde BigBan Angels y que se ha decantado por Kukupia como primera inversión ya que al provenir de Lanzadera tenía un plan de negocio maduro y validado por una aceleradora de prestigio.

BSF ha liderado la ronda de inversión, y al fondo se han unido dos inversores más para completar los 200.000 euros que permitirán a Kukupia llevar a cabo su plan de internacionalización. Una expansión en la que contarán con la experiencia y los conocimientos financieros y tecnológicos de los miembros del fondo, lo que permitirá abrir nuevos mercados y trabajar en productos con un alto componente de I+D+I.

El presidente de BSF, Marcos J. Lacruz, ha asegurado que "cuando evaluamos el proyecto de Kukupia, nos encontramos una empresa con sólidos fundamentos, un gran equipo y un excelente producto. Nuestra idea inicial era invertir en más de una empresa, pero Kukupia nos cautivó de tal manera que decidimos concentrar nuestros recursos en este proyecto", y ha añadido que los miembros de este vehículo de coinversión "estamos evaluando nuevas opciones de inversión a futuro, pues la experiencia de trabajo del equipo de inversión ha sido muy gratificante y efectiva. Hemos levantado la ronda en tiempo récord y entablado estrechas relaciones entre nosotros".

Kukupia está impulsada por los ingenieros andaluces Rubén López, Jesús García, Bernardo Plaza y Guillermo López, quiénen han aprovechado las nuevas tecnologías para diseñar y desarrollar accesorios médicos destinados a controlor la salud y a mejorar la calidad de vida. La compañía lanzó en abril de este año su primer dispositivo, eKuore, un fonendoscopio que envía el audio de las pulsaciones al smartphone y permite grabar la señal de lo que se ausculta y editarla.

Esto permite al médico que está en la consulta, si duda de lo que está escuchando y de lo que puede conllevar, envíar el audio al cardiólogo para que le diga qué le parece. Este aparato está compuesto por dos elementos, por un lado el fonendoscopio como tal, que actúa como el emisor, y un receptor que se conecta vía bluetooth a un smartphone, un tablet o un equipo de audio compatible. De esta forma, se obtiene una nueva forma de auscultar que, además de ser más cómoda, proporciona una mayor precisión, ya que permite recoger, procesar y amplificar el audio electrónicamente.

Además, ofrece la posibilidad de regular el volumen del audio y de utilizar campanas intercambiables de diferentes medidas. Los datos enviados a los dispositivos conectados al receptor son tratados con una aplicación a través de la cual puedes observar la información del fonocardiograma y el número de latidos por minuto, así como filtrar los resultados dependiendo del órgano auscultado: corazón o pulmones. De momento han aterrizado en el mercado veterinario pero entre 2014 y 2015 saldrá al mercado médico. 

La experiencia de este fondo de algunos socios de BigBan se repetirá todos los años con la creación de sucesivas sociedades. Para ello, se realizará una convocatoria entre los 150 socios de BigBan, que podrán aportar desde 5.000 euros cada uno, hasta completar 300.000 euros por año. Shuttle 2014 reunió menos dinero por falta de tiempo. Shuttle 2014 es el segundo vehículo de coinversión que pone en marcha BigBan. El primero fue The Road Project 2013, que logró sumar 200.000 euros de un total de 61 business angels para invertir en un solo proyecto. La aportación mínima en este caso era de 1.000 euros.