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VALENCIA. El Gobierno de Extremadura lanzó este miércoles una campaña para defender su posición en el debate sobre el futuro nuevo modelo de financiación autonómica. El ejecutivo que preside Juan Antonio Monago (PP) echó unos cálculos y concluyó que Cataluña y la Comunitat Valenciana son las dos autonomías que más fondos reciben del Estado por habitante, una afirmación que contradice no solo el discurso que defiende la Generalitat Valenciana sino también todos los informes de expertos que se han elaborado. 

¿Dónde está la trampa? Lo cierto es que el Gobierno de Extremadura mezcló de forma tendenciosa las transferencias corrientes que percibe la Generalitat Valenciana por el sistema de financiación con el dinero que le ha prestado el Estado por el Fondo de Liquidez Autonómico (FLA). Una suma que no tiene sentido, puesto que el FLA es un préstamo que la Generalitat tiene que devolver con intereses -no son transferencias para financiar competencias de sanidad o educación- y además la Generalitat tiene que recurrir a esa asistencia finaciera precisamente porque ha tenido que endeudarse en exceso por la mala financiación que tiene. 

Más allá de esa falta de rigor en el dato fundamental del informe que presentó el gobierno extremeño, la campaña que lanzó este miércoles incluye un video en el que explica lo que califica de "otras balanzas", en contraposición a la fiscal, en las que la región aporta a la economía española. En ese repaso igual da como dato positivo el hecho de que el 38% de los extremeños hayan tenido que emigrar por falta de oportunidades en la región -"aportamos manos de obra a España"- como lamenta la falta de inversión del Estado en ferrocarril, en una serie de datos inconexos y que en muchos casos no tienen que ver con el sistema de financiación. 

Extremadura ha decidido encabezar el frente que se opone a la modificación del actual sistema, tal y como reclaman autonomías infrafinanciadas como la valenciana, y su presidente ha elegido en diversas ocasiones a la Comunitat Valenciana como punching ball de sus ataques.