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MADRID. Las comunidades autónomas que no cumplieron el déficit establecido en 2012 crecieron, o más bien decrecieron en menor medida, que las más recortadas por sus presidentes autonómicos. Así lo apuntaba este lunes el economista jefe para España de BBVA Research, Miguel Cardoso.

Entre las incumplidoras del objetivo, Cataluña redujo su Producto Interior Bruto (PIB) un 0,1% respecto a 2011, Murcia un 1,8%, la Comunitat Valenciana un 1,4%, Andalucía un 1,8% y Baleares lo aumentó un 0,5%. Mientras, las que más esfuerzos realizaron para reducir su déficit, han sido las que más lo han sufrido. Extremadura redujo su crecimiento un 2,4%, Castilla La Mancha un 2,6% y Extremadura un 2,5%.

Cardoso explicó en una jornada de la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE) que es imposible crecer cuando el sector público ha quitado un 7,5% del PIB a la economía española. No obstante, apuntó que se espera un recorte menor en 2013, de un 2,5% del PIB. Además, recalcó que en 2014 no tendría que haber casi ajuste fiscal, ya que cada vez sería menor para llegar a los objetivos de déficit marcados.

Según apuntaba el economista jefe para España del BBVA Research, el inicio de la recuperación llegará en 2014. "En la medida que veamos una recuperación, debería haber un crecimiento de las exportaciones" explicaba Cardoso. Apuestan por un incremento en las inversiones en maquinaria y equipo y confían en que el ajuste en algunos sectores, como la construcción, está llegando a su fin. "El sector se está ajustando a la baja, ha pasado del 15% del empleo al 7,8%".

UNAS PREVISIONES 'IRREALES' PERO REALISTAS

Tras la jornada, el secretario de Estado de Economía y Apoyo a la Empresa, Fernando Jiménez Latorre, explicó en un almuerzo respecto a fiscalidad que el programa de estabilidad 2013-2016 estima una necesidad en 2013 de 3.000 millones de euros, de los que una tercera parte llegarán vía impuestos y otras dos terceras partes de la lucha contra el fraude y por la contención del gasto.

Además, señaló que el nuevo cuadro macroeconómico del Gobierno, que sitúa la caída del PIB en el 1,3% este año, trata de darle mayor credibilidad a la política fiscal española y no pretende "provocar sorpresas" en los Presupuestos Generales del Estado" y en el caso de ser así, que sean "sorpresas positivas". Además, aseguró que las subidas de impuestos en ningún caso serán del IRPF y el IVA. 

No obstante, analizó los cambios en algunas variables que modificarían y mejorarían estas previsiones. Desde Economía apuntaron a que, un cambio en el interés a largo plazo, dado por la bajada durante un año de la prima de riesgo a 100 puntos, adelantarían la recuperación. El PIB podría aumentar alrededor de un 0,7%, con un punto de partida de un bono a 10 años del 4,8%. Por lo que si se diera esta situación, las economía solo decrecería este año un 0,5%.

También explicó que los dos años adicionales de plazo que ha concedido Bruselas a España para lograr el objetivo de déficit dan un mayor respiro, aunque es importante continuar en la corrección de los desequilibrios y con el esfuerzo.