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MADRID (EP). El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha defendido al Rey y ha subrayado la "pujanza" que a su juicio tiene la institución que don Juan Carlos representa, cuyo papel en la transición española y durante el intento de golpe de Estado del 23-F "demuestran quién es el monarca". 

"Creo que una gran mayoría de españoles siguen apoyando una institución que ha sido muy útil y muy provechosa para el país", ha afirmado Rajoy durante una rueda de prensa en La Moncloa tras reunirse con el primer ministro británico David Cameron, que se ha ausentado de la comparecencia ante los medios para volver al Reino Unido tras conocerse el fallecimiento de su antecesora Margaret Thatcher.

El "papel" desempeñado por el Rey en la Transición y en el frustrado golpe de Estado del 23 de febrero de 1981 demuestran, a juicio de Rajoy, "quién es el monarca" y la "pujanza" de una institución que sigue apoyando una "gran mayoría de españoles".

Así se ha pronunciado tras ser preguntado por la crisis institucional que atraviesa el país y que afecta tanto a los dos principales partidos políticos como a la monarquía. Ante esta situación, el jefe del Ejecutivo ha indicado que lo que hará es seguir trabajando para "recuperar la confianza" de los ciudadanos.

Tras reconocer que su Gobierno ha tenido que llevar a cabo reformas "duras" que incluso contradecían lo que prometía el programa electoral del PP con el que ganaron las últimas elecciones generales, se ha mostrado convencido de que esas decisiones "difíciles" eran las que había que tomar "para afrontar la crisis y volver al crecimiento y al empleo".

"EFECTOS POSITIVOS"

En su opinión, algunas de esas medidas ya están teniendo "efectos positivos". Se ha referido, entre otros, a la evolución de las exportaciones, la reducción del déficit público y la recuperación de la confianza de los inversores extranjeros en la deuda pública española.

Ahora hace falta, ha admitido, que estos efectos positivos comiencen a ser percibidos por la ciudadanía, algo que "aún llevará su tiempo". No obstante, se ha mostrado convencido de que "al final" también el Gobierno recuperará la confianza de los ciudadanos.