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La crisis ha provocado un incremento notable en la tasa de economía sumergida en la Comunitat Valenciana que en el último año ascendió hasta el 24,3 por ciento del PIB, lo que significa que un total de 24.706 millones de euros anuales escapan al control del Fisco. 

Unas cifras que se desprenden del último 'Informe de Economía Sumergida 2000-2009' elaborado por los Técnicos del Ministerio y Hacienda (Gestsha). Por provincias, Valencia lideró el ranking de mayor fraude fiscal el pasado año con una tasa de economía sumergida del 25,3% del PIB, seguida de Alicante, con una tasa del 24,5%, y por último Castellón, que fue la que menos fraude registró (19,8%).

Según este informe, la aplicación de un plan antifraude eficaz que redujera en diez puntos porcentuales la tasa de economía sumergida y la situara en los niveles de otros países de Europa, generaría un aumento de recaudación de 2.512 millones de euros anuales en Valencia, lo que supondría un ahorro medio de impuestos de 773 euros por habitante; mientras en Alicante el incremento alcanzaría 1.287 millones y un ahorro de 681 euros. Por último, en Castellón el aumento de recaudación sería de 591 millones, con un ahorro de impuestos de 853 euros.

Con objeto de mostrar la envergadura de esta cifra, el informe de Gestha recoge un supuesto en el que considera para el análisis al conjunto de la población de Valencia, según el cual, esta cifra de dinero negro equivaldría a decir que cada valenciano oculta a Hacienda rentas por valor de 5.331 euros de media al año. En Alicante esta cifra es de 8.592 euros de media al año y en Castellón de 4.602 euros.

El informe indica que la crisis motivó un importante crecimiento del fraude fiscal en los tres últimos años, lo que unido a la caída de la actividad económica, provocó un desplome de la recaudación tributaria en Valencia del 38,8 por ciento, situándose en 6.250 millones de euros en 2009. Este desplome en Alicante alcanzó un 46,1 por ciento, situándose en 1.917 millones de euros en 2009 y en Castellón llegó al 64,8 por ciento, situándose en 777 millones de euros en 2009.

IMPUESTO DE SOCIEDADES Y EL IVA

Las partidas más perjudicadas en Valencia por la crisis y el fraude fueron, precisamente, el Impuesto de Sociedades y el IVA, que cayeron un 63,5 por ciento (en volumen, 1.582 millones de euros menos) y un 47,6 por ciento (en volumen, 1.526 millones de euros menos), respectivamente, entre 2007 y 2009.

En Alicante las partidas más perjudicadas fueron los mismos impuestos que en Valencia, que cayeron un 60,36 por ciento (en volumen, 707 millones de euros menos) y un 50,1 por ciento (en volumen, 452 millones de euros menos), respectivamente entre 2007 y 2009.

Al igual que en Castellón, donde el IVA y el Impuesto de Sociedades cayeron un 85,9 por ciento (en volumen, 611 millones de euros menos) y un 70 por ciento (en volumen, 445 millones de euros menos), respectivamente entre 2007 y 2009.

De esta forma, la bolsa de dinero negro aumentó en un 27,1 por ciento en Valencia en el ultimo decenio, lo que explica que aunque la economía creció a niveles históricos gracias al 'boom' inmobiliario, la recaudación lo hiciera a un ritmo mucho menor debido a la evasión fiscal en el sector constructor y promotor, donde las operaciones especulativas de compra-venta inmobiliarias encontraron su caldo de cultivo. En Alicante, la bolsa de dinero negro aumentó en un 31 por ciento en Alicante en el ultimo decenio, mientras que en Castellón la bolsa de dinero negro aumentó en un 41,4 por ciento en el ultimo decenio.