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MADRID (EP). El director financiero de Repsol, Miguel Martínez, asegura que la compañía "acabará de solucionar en breve" los "daños" y los "problemas de balance sufridos" a causa de la "tristemente en curso confiscación" de YPF por parte del Gobierno argentino.

Durante su intervención en el X Encuentro del sector energético organizado por el Iese, el directivo recordó que la expropiación de YPF ha situado a la petrolera en el último escalafón del grado de inversión dentro de los baremos utilizados por las agencias de 'rating'.

No obstante, la compañía trabaja en la venta de su negocio de gas natural licuado (GNL) y dispone de caja y líneas de crédito por valor de 9.000 millones de euros que le permiten desarrollar con normalidad su actividad e incluso, en palabras de Martínez, "cruzar cualquier zona desértica".

El directivo explicó que el petrolero es un negocio en el que el nivel de endeudamiento es más bajo que en otras empresas por la variedad de riesgos que afronta.

"ROBO" EN ARGENTINA

"Amanecemos sufriendo riesgos y nos acostamos sufriendo más riesgos. El día en que no nos roban en Argentina, el barril cae de 146 a 38 dólares en apenas tres meses", señaló.

Repsol, indicó, lleva desde 2011 "llenando la mochila" y realiza una política financiera prudente, lo que le permite afrontar un momento en el que "es evidente que no hay crédito". La liquidez, señaló, es fundamental en una empresa.

Junto a esto, consideró que los carburantes son, frente a la opinión generalizada, "muy baratos" y que su compañía los vende a precios inferiores al "agua mineral", si bien el consumidor debe afrontar posteriormente impuestos cercanos al 50%.

LOS IMPUESTOS SE COMEN EL PRECIO

"Vendemos a 16 ó 20 céntimos por litro. No conozco ninguna bebida, ni el agua mineral, que se venda por ese precio, que es muy barato", afirmó, antes de señalar que, por cada 1,5 euros que se pagan por la gasolina, 0,75 son impuestos.

Para el directivo, el negocio de comercialización de carburantes de la compañía se está viendo afectado por la "variable crítica del consumo", que lleva varios años cayendo. "Desde 2008, la pérdida equivale ya al consumo de Portugal", afirmó.

SE CERRARÁN REFINERÍAS

Sobre la actividad de refino, Martínez pronosticó que se producirán cierres de refinerías en Europa, pero "no en España". Esta medida se presenta como la "solución" al problema de "sobrecapacidad" de procesamiento de hidrocarburos que sufre el continente.

El directivo, que pronosticó que el precio del crudo "seguirá subiendo", lamentó que, dentro del área de refino, "el regulador no ayuda" y las empresas se ven obligadas además a pagar un buen número de impuestos.