LONDRES (EFE). El consejero delegado de Barclays, Antony Jenkins, presentó ayer un ambicioso plan de reforma del banco británico con el que aspira a restaurar su vapuleada reputación y liderar el cambio que, a su juicio, "debería afrontar todo el sector bancario en la próxima década".
Según Jenkins, la crisis financiera y otros escándalos en el mundo de la banca significan que a partir de ahora "no se podrán obtener beneficios sostenibles a largo plazo sin actuar en función de unos valores".
Son estos valores, de "integridad, respeto, servicio, excelencia y diligencia", los que quiere implantar en una entidad desacreditada por manipular el Libor y que todavía está siendo investigada por sus turbias gestiones con un fondo qatarí para evitar ser rescatado en 2008.
UNA NUEVA ERA
En una ponencia ante inversores tras presentar los resultados de 2012, Jenkins afirmó que Barclays "está cambiando su manera de hacer negocios y los negocios que hace", en un proceso para el que "no hay vuelta atrás".
De acuerdo con el consejero delegado, que sustituyó al desprestigiado Bob Diamond el pasado agosto, la ralentización de la economía, el endurecimiento de la normativa financiera y las mayores expectativas de los clientes obligan a reformar el negocio bancario. "Los bancos que no se den cuenta de este cambio y no modifiquen su enfoque, se quedarán atrás", vaticinó Jenkins.
A LIMPIAR LA IMAGEN
El directivo, nombrado con la misión de limpiar la imagen de Barclays, no dudó de que el banco retendrá su competitividad, pese a a anunciar hoy unas pérdidas netas de 1.041 millones de libras (unos 1.207 millones de euros), debidas sobre todo a las indemnizaciones abonadas por venta engañosa de productos financieros.
Como parte del "Proyecto Reforma", la directiva ha realizado una revisión de las 75 unidades de negocio para examinar cuáles arrojan beneficio y cuál es su riesgo para la reputación de la institución, una de las más antiguas del mundo, fundada en 1690 y con 140.000 empleados.
POTENCIANDO LA INVERSIÓN
Como consecuencia, se ha decidido potenciar la inversión en el Reino Unido, Estados Unidos y África en perjuicio de las actividades en Europa y Asia, con la supresión de 3.700 empleos, 1.800 en la rama de inversión y 1.900 en la banca minorista europea, unos 1.100 de ellos seguramente en España.
En lo que pretende ser el golpe maestro, se elimina la división de asesoramiento a empresas para la evasión de impuestos, Mercados de capital estructurados, en un intento de pasar página a los trapicheos del pasado.
FUERTE AHORRO DE GASTOS
Según Jenkins, la reestructuración del banco, que tendrá un coste a corto plazo, permitirá a la larga ahorrar 1.700 millones de libras (1.972 millones de euros) en gastos, hasta situarlos en 16.800 millones de libras (19.488 millones de euros) en 2015.
El directivo reconoció que hay una serie de obstáculos en la ejecución de su plan de reforma, como que empeore la situación de la economía global, que haya "cambios bruscos en la normativa" o que regresen los escándalos del pasado.
Por otra parte, los analistas y la opinión pública se han tomado con cautela sus promesas de limpieza, pues a nadie se le escapa que Jenkins es un histórico del banco que ocupaba un puesto directivo cuando salieron a la luz los trapos sucios.
BANCA DE INVERSIÓN
Además, se considera que no se ha reducido lo suficiente el negocio de banca de inversión, el más arriesgado, y que aún son demasiado altos las primas e incentivos a los empleados, cifrados en 1.850 millones de libras en 2012 (2.150 millones de euros), algo inferiores que en 2011.
El propio Jenkins sí ha renunciado en cambio a su bonificación correspondiente al año pasado, que calificó de "difícil". Pese a las dudas sobre la profundidad del cambio en Barclays, los inversores en la Bolsa de Londres valoraron ayer muy positivamente la reestructuración anunciada, en particular la supresión de empleo mayor de lo esperado. Esto motivó que las acciones del banco, el segundo del Reino Unido por activos, subieran más de un 8%.
Actualmente no hay comentarios para esta noticia.
Si quieres dejarnos un comentario rellena el siguiente formulario con tu nombre, tu dirección de correo electrónico y tu comentario.
Tu email nunca será publicado o compartido. Los campos con * son obligatorios. Los comentarios deben ser aprobados por el administrador antes de ser publicados.