VALENCIA. Valdez y Míchel no fueron el fichaje estrella, de hecho de momento no tienen ni siquiera el cartel de titulares, sin embargo los dos fueron los héroes valencianistas y levantinistas del fin de semana. Con sus goles sobre la bocina dieron a sus equipos victorias importantísimas y muy necesarias. Además con sus goles recordaron que la segunda unidad de Valencia y Levante está lista y con ganas de dar guerra.
VALDEZ HA DISIPADO LAS DUDAS QUE GENERÓ SU FICHAJE
Nelson Haedo Valdez llegó por sorpresa a la disciplina valencianista y su incorporación no terminó de convencer al aficionado de Mestalla. Su trayectoria en el fútbol alemán y su paso por el Hércules de Alicante no se entendía como aval suficiente como para formar parte de la plantilla de Pellegrino.
Sin embargo, el ‘león guaraní' pronto ha cambiado esa opinión. En apenas dos meses y con muy poquitas apariciones en el estadio valencianista, el sudamericano ya se ha metido al respetable en la mochila. Su raza, su carácter, su personalidad, su incansable pelea y sus goles han convencido al socio che de que Valdez es más que válido para este proyecto.
El paraguayo llegó con ganas de triunfar en España tras haber pasado por Alicante si mucha fortuna. Valdez siempre ha sido un futbolista de campanillas en sus equipos. Como él mismo reconoció en su presentación, en la selección y en su paso por Alemania siempre fue una estrella que aquí esperaba lucir. Y de momento lo está consiguiendo. Sus actuaciones siempre el aportan cosas diferentes al equipo, tanto que ya son muchas las voces que empiezan a pedir su titularidad.
Sólo lleva dos meses de blanquinegro, pero la rabia con la que celebró el tanto de la victoria ante el Athletic le coloca ya en el corazón blanquinegro. Su fichaje se cerró para sustituir a Aduriz en la plantilla, y apareció en Mestalla justo la noche en la que el vasco estaba amargándole la existencia al valencianismo y él le regalo una sonrisa. Llegó como un actor secundario pero si el león sigue rugiendo no se descarta que le cambien el papel.
MICHEL NO QUIERE DESAPROVECHAR SU TERCERA OPORTUNIDAD EN TERCERA
Míchel Herrero llegó el pasado verano al Levante después de una magnífica temporada en Segunda con el Hércules en el que fue máximo goleador con trece tantos. Aún así, en el Valencia no le vieron hueco para que formara parte ni siquiera de la plantilla que realizaba la pretemporada. Ante eso él decidió aceptar la oferta del otro club de la ciudad, rechazando una propuesta económica superior de Osasuna.
Lo hizo porque estaba convencido de que esta iba a ser la temporada de su consagración como jugador de Primera, tras dos varapalos, uno en el Valencia y otro más gordo en el Deportivo de la Coruña, equipo en el que no pudo jugar casi, por lesión, y con el que perdió la categoría.
Y de verdad parece que va a ser su año. Míchel ha empezado eléctrico. A pesar de que aún no se ha ganado la titularidad y en muchos partidos está partiendo desde el banquillo, ya suma tres goles oficiales, dos en Liga y otro en Europa League. Eso sí, los dos de Liga han sido dos obras de arte. Dos goles propios de un futbolista de muchos quilates. Míchel también llegó para ser un actor de relleno, sin embargo muy pronto ha empezado a demostrar que a él sólo le van los papeles principales.
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