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VALENCIA. Seis de seis. Esos son los puntos que le ha dado Obafemi Martins al Levante desde que llegará al equipo hace ahora 3 semanas. 

El nigeriano fue el futbolista por el que club peleó todo el verano y por el que se ha tenido que hacer un esfuerzo económico fuera de lo habitual en la entidad granota. Ese esfuerzo se empieza a ver retribuido por el goleador que ha tenido un impacto en fulgurante en el equipo.

En sus primeros 45 minutos contra la Real Sociedad el africano fue un torbellino. Logró tres tantos, dos de ellos anulados por fuera juego dudoso y el que si subió al marcador fue el que le dio la victoria a los granotas.

En su segundo partido en Pamplona estuvo desaparecido como el resto del equipo pero ayer no falló a su cita con Orriols. Una cita que de momento es idílica. Dos partidos y cuatro volteretas, dos por cada gol que ha logrado Obafemi. Un recital que el aficionado granota ya conoce de memoria y que empieza desear con todas sus fuerzas.

Hace dos años Caicedo sorprendió a propios y extraños despertando tras dos temporadas malísimas en Europa. Se fue el ecuatoriano y llegó Koné, un delantero que llevaba cuatro temporadas sin rascarla en el Sevilla y sobre el que todo el mundillo futbolero tenía muchas dudas de que pudiera rendir por sus lesiones de rodilla. Llegó al Levante y se salió, hizo 17 goles y este verano se ha ganado un equipo de Premier. Este año parecia que el Levante no encontraría ese delantero que le diera ese plus de calidad y de gol que le hiciera encarar la temporada con garantías. Sin embargo, lo encontró.

Fue en Rusia. Prácticamente apartado del Rubin Kazan en el que no contaba ni para los amistosos. Su carrera iba en clara decadencia tras salir del Inter y pasar por Newcastle, Wolsfburgo, Birmingham y Rubin Kazan y no conseguir triunfar en ninguno de esos clubes. El Levante se la jugó. Manolo Salvador, el director deportivo volvió a apostar por el futbolista y a creer en la magia de Orriols para resucitar carreras perdidas. Esa magia ha vuelto a funcionar. De momento dos partidos en casa dos goles que han dado seis puntos. Desde luego Oba-Oba ya es el grito de guerra del levantinismo.