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VALENCIA. El artista suizo Helmut Federle (Solothurn, 1944) propone acompañarle en un "viaje espiritual y existencialista" para "dialogar con la diversidad de pensamientos y culturas" que conviven en el mundo, y lo hace a través de una selección de obras propias y otras piezas pertenecientes a su colección privada, muchas de las cuales se exhibirán ahora por primera vez, en el Centro cultural Bancaja de Valencia.

Bajo el título 'Helmut Federle Esencial', la muestra -la segunda que se realiza en España centrada en su figura- reúne un total de 53 piezas que repasan desde sus comienzos en la década de los 50 hasta la actualidad, y que permiten adentrarse tanto en la obra como en la personalidad de uno de los pintores abstractos más valorados en la escena europea. Considerado heredero de creadores como Mark Rothko, Barnet Newman o Agnes Martin, su trabajo se centra en las formas elementales, los colores sobrios, la dimensión simbólica y las referencias figurativas.

Para el propio Federle, esta selección pretende ser un "viaje espiritual" para dialogar con las diferentes culturas que conviven en el mundo. De hecho, como incansable viajero que es, residente en una ciudad diferente según la etapa de su vida, sus obras "expresan un momento y un contexto determinado" y según sus circunstancias, cada una tiene una cierta "cualidad metafórica". Puede transmitir "belleza, enfado, deseo o ira", ha apuntado.

Así lo ha manifestado este jueves durante la presentación de la exposición que convivirá al lado de la de Andy Warhol en el Centro Cultural Bancaja, hasta el próximo 5 de enero. El comisario Juan Manuel Bonet y el vicepresidente de la Fundación Bancaja, Vicente Montesinos le han acompañado en el primer recorrido por las salas.

En él aprecia la versatilidad de Federle con trabajos de diversas disciplinas como dibujos, fotografías y pinturas sobre papel, además de incluir algunos de sus cuadros más reconocidos como 'El Caso de Jeremiah (ocho)' (2005), que destaca por sus grandes dimensiones; 'Pantera negra' (1997), perteneciente a la colección del IVAM; o los cuadros de los fondos de la Colección Bancaja: 'Tres formas, 1/4, 1/8, 1/16' (1998), 'Edelweis VII' y 'Edelweis XI', ambas de 2005.

Al respecto, Federle ha explicado que en los años 70 realizaba obras más formales geométricamente, sin embargo en los últimos años sus obras adquieren una "calidad más metafísica". "Quizá sea por mi edad o por la experiencia acumulada", ha reflexionado el artista, pero en cualquier caso, se encuentra ahora en su momento "más espiritual".

Asimismo, se incluyen piezas de su colección privada que han servido de inspiración a su trabajo y que documentan sus intereses e influencias artísticas. En ellas están representadas las culturas prehispánicas, las del extremo oriente, la teosofía y el textil de la Norteamérica profunda y de Japón. Tendencias que se aprecian en diferentes esculturas, piezas de tela bordada, sedas orientales o pinturas de tradición constructiva firmadas por Frantisek Kupka y Sol LeWitt.

Federle ha recordado que fue en un viaje a Nepal en 1969 cuando comenzó su afición por coleccionar y desde entonces ha cultivado hasta tal punto esta afición que "se ha convertido en algo tan importante como la obra propia". No obstante, en su colección no cuenta con ninguna obra española, aunque según ha asegurado, le encantaría tener un Greco, un Velázquez o un Zurbarán entre sus fondos. Es más, para ser sincero: "Prefiero la pintura española a la italiana", ha confesado.

"HABLAR DE COSAS REALES"

Por otra parte, preguntado por la influencia de la situación económica actual en el arte, Federle ha comentado que "en estas circunstancias el arte se vuelve un poco cínico e interactúa" con la realidad. "La gente rica compra obras cínicas básicamente" y al final, "el arte acaba amalagamándose con ese concepto de alto capitalismo".

Por su parte, el comisario Juan Manuel Bonet ha destacado cómo el arte de Federle "es un geómetra espiritual del silencio" quiere "expresar las emociones humanas básicas, el amor, la vida... es un arte que es abstracto sin dejar de hablar de cosas reales".

Centro Cultural Bancaja
Plaza Tetuán, 23 VALENCIA
De lunes a sábado, de 10 a 14 y de 17 a 21 horas