VALENCIA (VP). Las acciones de Uralita no sólo se mantuvieron al margen de la corriente alcista que se impuso ayer en bolsa sino que presentaron un fuerte descenso del 5,66% -el quinto más pronunciado de todo el Mercado Continuo- cerrando en los 1,50 euros después de mover 149.035 títulos, seis veces por encima de la media diaria anual aunque muy inferior a lo que venía negociando en las últimas sesiones.
El precio al que despidió la primera sesión de la semana representa una espectacular caída del 35,78% respecto a los 2,30 euros que llegó a tocar durante la sesión del pasado 25 de septiembre aunque al final cerró ese día en los 2 euros. Hasta aquí todo normal, dado que la especulación de turno está haciendo de las suyas en las últimas semanas sobre Uralita y los valores vinculados de alguna forma a los megaproyectos anunciados de Eurovegas y Barcelona World.
Sin embargo, ayer se conoció el por qué del batacazo del valor que controla la familia Serratosa a través de su corporación empresarial Nefinsa: uno de sus accionistas de referencia, Ceiss -la entidad resultante de la fusión de Caja Duero y Caja España- ha vendido en las últimas cuatro sesiones 491.762 'uralitas'.
Lo ha hecho a un precio comprendido entre los 1,50 euros (el cierre de ayer) y los 2,24 euros, lo que arroja un importe en torno al millón de euros.
VENTAS POR DOQUIER
De este modo, la entidad ha pasado de tener en cartera el 5,243% del capital social del fabricante de materiales de construcción hasta el 4,994%, según los datos que figuraban ayer lunes en la web de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Ceiss, cuya participación viene heredada primero de Caja Duero -más de una década dentro del capital- y posteriormente de Caja España de Inversiones Salamana y Soria, vendió el pasado 25 de septiembre 134.844 títulos en dos operaciones entre 2 y 2,08 euros. Esa jornada las acciones cerraron a 2 euros después de protagonizar la mayor subida en el parqué de toda su historia (+61,94%).
Al día siguiente Ceiis necesitó hasta 34 operaciones -es lo que tiene operar con un valor tan estrecho como Uralita- para desprenderse de 325.918 acciones a unos precios comprendidos entre los 1,50 y 2,24 euros. Todo ello en una sesión donde se movió el volumen más elevado de los últimos ocho años, con más de un millón de 'uralitas'.
El jueves 27 las ventas de la entidad que sigue sonando con fuerza en subir al altar con Unicaja soltó 20.000 títulos en una sola operación a un precio de 2,26 euros; mientras que el último día de la semana pasada el papel que aflojó Ceiss fue de 11.000 acciones en cuatro operaciones y unos precios que fueron desde los 1,52 hasta los 1,55 euros.
HACIENDO CAJA
"No me extraría que Ceiss siga soltando papel en los próximos días para hacer caja -aunque con minusvalías- y apuntalar sus ratios, dado que tal y como desveló el informe de Oliver Wyman arrojaba unas necesidades de capital adicional entre 1.269 y 2.063 millones de euros", apuntan desde una mesa de intermediación bursátil. Las mismas que recuerdan que caso de fusionarse con Unicaja no necesitaría más fondos adicionales.
Lo que es un hecho palpable es que la CNMV venía siguiendo los movimientos del valor y, tal y como publicó este ValenciaPlaza la semana pasada, el organismo supervisor le pidió explicaciones ante tamaña subida en bolsa donde llegó a duplicar su valor en el parqué en cuestión de días.
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