VALENCIA. La empresa Cessver, empresa encargada de cambiar el césped del estadio de Mestalla la pasada campaña, defiende su trabajo después de las muchas críticas que ha recibido durante el mes de agosto y sobre todo, después del partido del pasado domingo entre el Valencia y el Depor en el que el estado del terreno de juego fue lamentable.
Por ello, la empresa valenciana argumenta que el Valencia ya fue avisado la pasada temporada, cuando llevaron a cabo la colocación del actual césped de Mestalla, que lo normal era que en un año esa hierba tuviera que ser sustituida de nuevo debido en gran parte a la gran utilización que se le da al campo.
Según aseguran fuentes de la empresa, el Valencia sabía que ese césped que le colocaban tenía la fecha de caducidad fijada en alrededor de un año, ya que es lo habitual cuando se utiliza tanto el campo. Según ellos, el césped del terreno de juego valencianista está ahora en tan mal estado debido principalmente a dos argumentos. Por un lado, la tremenda utilización que se le da, ya que en él se han disputado partidos prácticamente todas las semanas, además de algunos entrenamientos, así como algunos torneos de fútbol base y partidos de patrocinadores. Por otra parte, influye el tremendo calor que sufre el césped de Mestalla en los meses de verano, que además se ve aumentado al tratarse de un recinto cerrado que no dispone de una buena ventilación, lo que ha provocado que el césped se haya cocido literalmente este verano.
Por todo eso, el club blanquinegro debería haber cambiado la hierba de su estadio justo cuando acabó la pasada campaña, o en su defecto durante el mes de agosto, para que hubiera estado en condiciones óptimas para el inicio de la temporada. Según fuentes de Cessver, el el tiempo estimado para cambiar el césped del estadio de Mestalla es de unos cuatro días y al quinto ya se podría jugar sin que se levantara. Esa operación tiene un coste de entre unos 70.000 y unos 90.000 euros, pero todavía no está decidido quién será la empresa encargada de llevarlo a cabo.
Han sido muchas las voces que se han escuchado en los últimos días criticando el estado de la hierba, principalmente los jugadores que han sido quienes más lo han sufrido al tratarse de su lugar de trabajo. Pero desde la empresa encargada del césped de las instalaciones del Valencia, aseguran por un lado que el club ya sabía que tendría este problema y que por otra parte, en los tiempos que corren es muy habitual cambiar el césped cada temporada. De hecho, argumentan que equipos como Barcelona, Real Madrid o Málaga lo cambian todas las temporadas.
Sea como fuere, lo bien cierto es que Mestalla tendrá que volver a cambiar de tapete y ya son unos cuantos años sin acertar con la fórmula, ya que desde 2009 el club ha tenido que cambiar la hierba dos veces, ahora será la tercera, y entre medias compró lamparas de luz ultravioleta para adelantar el crecimiento de las semillas y a su vez, en el estadio habían búhos y águilas para espantar a las palomas que acudían para comerse las semillas plantadas.
Este año no habrá búhos ni palomas, pero lo que sí debería conseguir el Valencia es tener un césped a la altura del equipo que es y la historia que tiene Mestalla para el próximo partido que jugará ante el Celta el fin de semana del 15 y 16 de septiembre.
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