VALENCIA (VP/LUIS A. TORRALBA). El Banco Central Europeo (BCE) tuvo que inyectar 95.000 millones de euros al sistema financiero europeo el 9 de agosto de 2007, dado que el mercado interbancario se había quedado seco. Nadie prestaba un euro y las tensiones de liquidez habían hecho saltar las alarmas. Arrancaba la mayor crisis financiera desde la Gran Depresión, que a día de hoy todavía perdura. Basta echar un vistazo al interbancario para darse cuenta.
Desde aquella fecha, las cotizadas de la Comunitat Valenciana en el Mercado Continuo -bien porque están domiciliadas aquí o bien que su accionista de referencia sea de la tierra-, han perdido una capitalización bursátil de 15.699,28 millones de euros tomando como cierre la sesión del pasado viernes 6 de agosto.
La única que ha aguantado las embestidas del mercado ha sido Caja Mediterráneo (CAM), cuyas cuotas participativas se han anotado una mejora de un 5,31%, lo que representa un incremento de capitalización bursátil de 15,50 millones de euros. Pero eso sí, conviene tener claro dos detalles: por un lado, el histórico debut de la caja alicantina en bolsa se produjo el 23 de julio de 2008 -a un precio de 5,84 euros por título-, prácticamente un año después del estallido oficial de las llamadas 'hipotecas basura'; y, por otro, que se trata de un valor con un reducido 'free float', es decir, son pocos los títulos que cotizan libremente en el mercado.
Mientras el Ibex 35 se ha dejado en el camino en estos tres años un 28,22%, el resto de las cotizadas locales ha perdido bastante más. De hecho, Uralita ha sido la que menos caída porcentual presenta, con un 38,18%. O lo que es lo mismo: 487,83 millones de euros menos para la compañía controlada en un 80% por la familia Serratosa.
Más de dos tercios de las minusvalías latentes -pérdidas sin materializar-, que presenta el conjunto de los valores locales lleva el cuño de Iberdrola Renovables, pese a que su debut bursátil se produjo el 13 de diciembre de 2007, a un precio de 5,30 euros la acción. La filial verde de la primera eléctrica española ha sucumbido en un 49,43%, que en términos de capitalización bursátil equivalen a 11.067,05 millones de euros.
Tras Iberdrola Renovables, y en términos absolutos, aparece el Banco de Valencia, que se ha dejado atrás 2.926,20 millones de euros después de haber cedido en estos tres últimos ejercicios un 56,85%.
La 'familia Natra' también ha sucumbido a la negativa coyuntura, muy especialmente la matriz (Natra), que ha visto como se esfumaban 417,81 millones de euros de capitalización bursátil, al bajar sus acciones un 80,81% -la mayor caída en términos porcentuales de todas-.
Por su parte, las acciones de su filial de biotecnología (Natraceutical) han retrocedido un 69,23% en el Mercado Continuo, lo que equivale a una pérdida de valor en bolsa de 295,85 millones de euros.
Las dos cotizadas locales de consumo básico, Clínica Baviera y Corporación Dermoestética, han perdido 232,28 y 138,20 millones de euros respectivamente, que salen de sendas caídas bursátiles del orden del 62,04% y 77,35% respectivamente.
Por último, la constructora Cleop presenta unos números rojos en bolsa desde el 9 de agosto de 2007 de un 63,96%, que equivalen a 138,20 millones de euros menos de capitalización.
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