BARCELONA. El defensa Jordi Alba, fue presentado como nuevo jugador del Barcelona, y aseguró no sentir "presión alguna" al fichar por "el mejor club del mundo", sino que se toma esta oportunidad "como un reto" en su carrera tras haber tenido que abandonar el club con quince años.
Alba, que ahora ya tiene 23, ha firmado por cinco temporadas por el Barça, que ha pagado 14 millones al Valencia, el equipo de Primera División que apostó por él, después de que el catalán tuviese que buscarse la vida en el Cornellà durante las dos temporadas siguientes al ser 'cortado' por la entidad azulgrana.
Ocho años después, el lateral de L'Hospitalet (Barcelona) regresa por la puerta grande, como campeón de Europa con la selección española, blindado con una cláusula de rescisión de 90 millones y tras presentarse en el césped del Camp Nou ante unos 10.000 aficionados.
"Estoy contento por volver a casa con mi familia, con mi gente", manifestó Alba al inicio de su presentación ante la prensa, que se ha celebrado, a continuación, en la sala París del estadio.
El nuevo defensa del Barcelona compareció junto al vicepresidente deportivo, Josep Maria Bartomeu, y el director deportivo, Andoni Zubizarreta.
Bartomeu desvelóque "ya hacía un año largo" que el club azulgrana andaba detrás de él, mientras que Zubizarreta puso el ejemplo del gol que Alba marcó en la final de la Eurocopa contra Italia par definir la clase de jugador que es.
"Si una imagen vale más que mil palabras, ese gol resume lo que es Jordi Alba: un jugador activo, dinámico, profundo, intenso, con una excelente calidad técnica, polivalente y enormemente competitivo", destacó del nuevo lateral izquierdo del conjunto azulgrana.
El jugador llega avalado después de su gran Eurocopa y envuelto en la polémica que ha suscitado su convocatoria para los Juegos Olímpicos de Londres.
Alba confirmó que le dijo al seleccionador, Luis Milla, que le hacía "ilusión" disputar unos Juegos, y aseguró sentirse "fuerte" para enlazar las dos competiciones, aunque ha dejado que sea el Barcelona el que tenga la última palabra.
En este sentido, Zubizarreta apuntó que el club hablará con la Federación Española para ver "qué es lo mejor para el jugador, no solo a corto sino a medio y largo plazo", pero también quiso dejar claro que al lateral catalán "no se le ha fichado para un verano, sino por cinco temporadas".
Preguntado por esta segunda etapa en el Barça, Jordi Alba se mostró ilusionado y dispuesto a olvidarse de los motivos que forzaron su marcha -por su físico endeble- en edad juvenil.
"A nadie le gusta salir de un club como el Barcelona, pero me fui con la cabeza muy alta, porque creía en mí. No hay que mirar hacia atrás, sino adelante. Ahora hay otra gente aquí que ha confiado en mí e intentaré retornar esa confianza en el campo", declaró.
En el Barça volverá a reencontrarse con sus compañeros de selección, los mismos que le hacían bromas sobre su inminente fichaje por el conjunto azulgrana durante la Eurocopa, y con su amigo David Villa.
"Coincidí con él en el Valencia. Él allí ya era una estrella y me ayudó muchísimo desde el principio. Cuando debuté con la selección también fue el primero que me llamó y me acogió. Tenemos una gran amistad, me ha hablado maravillas del club, del vestuario y ya tengo ganas de conocer todo más a fondo", comentó.
Con Tito Vilanova, su nuevo entrenador, también mantuvo una charla cuando terminó la Eurocopa: "Me dio la enhorabuena. Me han hablado maravillas de él y seguro que lo hace igual de bien que Guardiola. Creo que está más que capacitado y seguro que nos va fenomenal con él".
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