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MADRID (EFECOM).- El ministro de Economía, Luis de Guindos, ha prometido hoy que la ayuda europea llegará "de forma muy rápida, en semanas" a las entidades en manos del Estado, como Bankia, CatalunyaCaixa, NovaGalicia o Banco de Valencia.

En un desayuno informativo organizado por Europa Press, el ministro ha explicado que el grueso de las necesidades de capital de la banca española está en esas cuatro entidades.

La idea del Gobierno es que el Eurogrupo del próximo lunes 9 sirva para firmar el memorando de entendimiento del préstamo a España para sanear la banca.

Ese documento será "la hoja de ruta" porque establecerá el calendario y permitirá que en cuanto se determinen las necesidades de capital exactas de las entidades puedan verse las primeras inyecciones.

Bankia ha pedido 19.000 millones para sanearse y se da por hecho que CatalunyaCaixa y NovaGalicia necesitarán al menos 10.000 millones, aunque las auditorías que se conocerán el próximo 31 de julio desvelarán el misterio.

Para el resto de entidades que puedan requerir apoyo público, los fondos europeos podrían llegar más adelante, ha dado a entender el ministro, quien ha añadido que habrá "diferentes desembolsos".

Esto abre la posibilidad de que se cobren también distintos tipos de interés por una ayuda que el ministro recuerda es en condiciones ventajosas, a un plazo muy amplio y con un periodo de gracia.

De Guindos ha recordado que la banca española tiene a su disposición hasta 100.000 millones de euros y las necesidades de capital en el caso más extremo se quedan en 62.000 millones.

De esa cifra habrá que ver cuánto corresponde a cada entidad. El Banco Santander, BBVA y CaixaBank no necesitan capital ni en las hipótesis más adversas y otras entidades podrían conseguirlo por sus propios medios.

No será ese el caso de las entidades en manos del Estado, ya que todas necesitan capital y especialmente Bankia por el estallido de la burbuja inmobiliaria.

De Guindos parece librar de toda responsabilidad al expresidente de la entidad Rodrigo Rato, al asegurar que la situación de Bankia se debe a los errores cometidos en el pasado por algunas de las cajas que lo crearon.

El ministro hizo alusión a la época del boom inmobiliario, anterior a la llegada de Rato a la presidencia de Caja Madrid, como la causa del origen de los problemas de la entidad. "Se cometieron errores y ahí están".

Por eso, ha justificado en que es necesario actuar y ha advertido de que "si muchas de estas cosas se hubieran hecho hace unos años, todo sería mucho más sencillo", en clara alusión a la política económica del anterior Gobierno.