MADRID (EP). El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha defendido las "reformas decisivas" que ha emprendido en este semestre de "serias dificultades" y ha dejado claro que no tiene "pendiente" ninguna crisis de Gobierno. Además de dar su respaldo expreso a la vicepresidenta económica, Elena Salgado, ha dicho que no contempla más "camino" que aprobar los Presupuestos Generales del Estado para 2011, sin querer siquiera entrar en la hipótesis de si un fracaso en esta tarea obligaría a adelantar las elecciones generales.
En rueda de prensa en el Palacio de la Moncloa, Zapatero ha hecho balance "de seis meses difíciles y de una intensa acción de Gobierno" y se ha mostrado convencido de que todas sus medidas --el recorte de gastos para reducir el déficit, la reforma laboral, la de las cajas y la futura reforma de las pensiones-- "darán resultado".
No obstante, aunque ha sugerido que en el segundo trimestre del año la economía española arrojará crecimiento, y más intenso que el 0,1 por ciento del primero, ha frenado el optimismo y ha optado por pedir "cautela" ante una "crisis que es "profunda y compleja". De hecho, ha recordado que en mayo se produjo un "rebrote inesperado" de la crisis por las dudas sobre la solvencia de la deuda soberana de varios países europeos, entre ellos España.
Zapatero ha reconocido que esa situación, con la atención internacional centrada en la solvencia de España, fue un "elemento de preocupación", pero que siempre entendió que esa "sensación no se correspondía con la realidad" y que las decisiones tomadas -tanto las reformas como la publicación de los tests de resistencia de las entidades financieras- "han ido poco a poco poniendo las cosas en su sitio" y "haciendo que la solvencia y la credibilidad de la economía española sean hoy mejores que a principios de año".
GARANTIZA QUE CUMPLIRÁ LAS REFORMAS
Y si persisten dudas sobre esa solvencia, ha afirmado que su receta es "cumplir, cumplir y cumplir", consciente de que durante un tiempo "en el que se va a escrutar el cumplimiento eficaz de las reformas". En ese paquete ha incluido la reforma de las pensiones que, ha recalcado, hay que hacerla "hoy" para que sea razonable y "asumible".
En su opinión, la economía española está en un "momento crucial" para modernizarse y el suyo es "seguramente el esfuerzo más ambicioso de reformas". "Austeridad, reformas y cohesión social", ha repetido una y otra vez. En esa línea, ha querido recalcar que "reformas modernizadoras y políticas sociales son inseparables" y ha negado que con todas sus reformas el PSOE se haya desplazado ideológicamente porque, según ha dicho, para hacer política social hace falta primero que la economía crezca y luego "voluntad política" para distribuir la riqueza. Y en eso, ha recalcado, sí puede acreditar su labor el PSOE.
El jefe del Ejecutivo ha dedicado buena parte de la hora y media que ha durado la rueda de prensa a explicar y defender la reforma laboral que aprobó el jueves el Congreso y ha insistido en que es "equilibrada", "de calado" y que su "finalidad fundamental es evitar los despidos" dando flexibilidad a las empresas. "Reitero esta afirmación, la reitero, la mantengo y la defenderé donde haga falta", ha manifestado. Ha anunciado además una reforma de las políticas activas de empleo para el otoño.
Zapatero ha dado las gracias a los grupos políticos que han facilitado la aprobación de la reforma --CiU y PNV, con su abstención en la votación del jueves-- aunque ha evitado caer en el "titular llamativo, espectacular" de decir que hayan hecho más por España que el PP. "No voy a caer en esa tentación, aunque la tenga", dijo.
"LAMENTABLE" QUE EL PP NO PRESENTE ALTERNATIVA
Al PP le ha reprochado que no haya presentado "una mínima alternativa" para generar "debate público" algo que, a su juicio, ha sido "bastante lamentable". "No tienen nada que decir, una de dos, o no se tiene una idea clara de lo que hay que hacer o no se atreve a decirlo", ha apostillado. En cambio, a quienes han apoyado esta y otras reformas --CiU permitió al Ejecutivo 'salvar' el decreto de recortes-- le ha dicho que "se reconocerá esa tarea de apoyo a las reformas difíciles" porque "votar con el Gobierno algo fácil tiene un mérito limitado".
Zapatero ha aprovechado para elogiar la "fortaleza" de "roca" del Grupo Parlamentario Socialista y su capacidad para forjar acuerdos en estos momentos. "Eso es hacer país", ha dicho, deseando que "más partidos políticos tuvieran esto en su ADN". De cara al próximo periodo de sesiones, ha subrayado que el Gobierno trabajará por aprobar los PGE aunque "sin hacer una narrativa pública" y convencido de que "existen condiciones para una actitud responsable de los grupos".
Sobre la posibilidad de un acuerdo más amplio de estabilidad parlamentaria, ha reiterado su "buena disposición" al diálogo con el PNV en una "tarea del día a día, que afecta a muchos ámbitos" pero ha incidido en dejar claro que el Gobierno negocia sobre "reformas, presupuestos y contenidos" y "si hay otros ámbitos serán de responsabilidad del Partido Socialista pero no del Gobierno". El jefe del Ejecutivo respondió así a la pregunta de si estaría dispuesto a negociar con el PNV el respeto a la lista más votada en las elecciones municipales y forales de 2011.
Pese a lo complicado del escenario parlamentario, Zapatero ha insistido en su disposición al diálogo y ha dejado claro que no contempla más "camino" que sacar adelante las cuentas públicas para 2011 y que no tiene "pendiente" ningún cambio de Gobierno. A los ministros, ha dicho, lo que les ha pedido es "eficacia en las reformas". Tampoco ha desvelado si volverá a ser candidato a la presidencia del Gobierno, ni cuando lo desvelará ni de qué dependerá la decisión que tome.
Actualmente no hay comentarios para esta noticia.
Si quieres dejarnos un comentario rellena el siguiente formulario con tu nombre, tu dirección de correo electrónico y tu comentario.
Tu email nunca será publicado o compartido. Los campos con * son obligatorios. Los comentarios deben ser aprobados por el administrador antes de ser publicados.