Plaza Privada / MARÍA COSTA. 31/07/2010 Es el propietario y creador del GTA Spano, un superdeportivo de lujo 'made in Valencia' que puede circular a 350km/h. Lleva tiempo buscando financiación para desarrollarlo. Si no la consigue en tres semanas  trasladará su fabricación a Jordania, donde sí la ha encontrado...

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VALENCIA. Domingo Ochoa, propietario y creador deL GTA Spano -un superdeportivo de lujo "made in Valencia" que puede circular a 350km/h- busca financiación. Si no lo consigue en tres semanas tendrá que trasladar su fábrica a Jordania donde sí están dispuestos a industrializarlo y obtener los beneficios económicos y de imagen que supone comercializar un vehículo como éste. De momento el único apoyo recibido es el del alcalde de Loriguilla, el resto, instituciones públicas, bancos e inversores privados hacen mutis por el foro. El nacimiento de su hijo y el de su coche, cuando lo puso a rodar por las calles, son dos de los momentos más inolvidables de su vida.

 

-¿Quién va finalmente a presumir de industrializar el GTA Spano?
-A falta de un milagro en las próximas semanas, Jordania. Aunque GTA motor es una empresa tecnológica con un producto demandado por el mercado, actualmente nuestra infraestructura sólo nos permite producir cuatro coches al año. Para que sea rentable el negocio tenemos que producir veinte unidades anuales. Sin embargo sin el apoyo de las instituciones públicas, ni de los bancos, ni de personas privadas es difícil seguir fabricando en la Comunidad Valenciana.

-¿Cómo se ha llegado a esta situación?
-Eso nos gustaría saber. GTA Spano nació en 2006, aunque no fue hasta 2009 cuando se presentó oficialmente el primer prototipo. Desde entonces buscamos financiación y sólo la encontramos en Jordania, lo que representa trasladar la empresa y el equipo técnico a otro país, aunque nosotros queremos quedarnos aquí.

-¿Qué ayudas le brinda Jordania para industrializar el proyecto?
-Son inversores que compran parte del proyecto para industrializarlo y de paso redirigir el beneficio social y económico a su país. El sector del automóvil marca el posicionamiento tecnológico de un país. Un segmento fuerte que como ocurre en Alemania, Francia, Italia o Inglaterra sube el PIB. España subcontrata este sector porque carece de creadores de tecnología propia. En España hay ayudas para la investigación, pero no para la industrialización.

-¿Qué milagro podría producirse?
-El único apoyo que tenemos es el del alcalde de Loriguilla, con el que hemos llegado a un acuerdo para una concesión administrativa de unos terrenos donde ubicar la nueva fábrica a cambio de crear 120 puestos de trabajo en la localidad. Sin embargo, los bienes inmuebles no son suficiente garantía para los bancos.

-¿Cuántos clientes tiene?
-No se lo puedo decir, pero sí que tenemos varios años garantizados de trabajo en máxima producción. Se han interesado por el vehículo países como China, India y Rusia e incluso en Vietnam han mostrado interés por adquirirlo. Este tipo de coches tiene más demanda que producción.

-¿En qué situación se encuentran sus más directos competidores españoles?
-Están igual o peor que yo. Les han prometido ayudas y no se han cumplido. Los inversores tienen miedo de invertir en España, pero no para comprar bonos en países terceros. Es incomprensible que no se ayude a un sector productivo que genera divisas para el país. Se ha ayudado a los bancos, se ha desprotegido a los funcionarios y jubilados, se indemniza a los parados para que sigan parados, éstos generan mucha economía B que no paga impuestos y resta trabajo. No se protege al que genera recursos. Si construyo 20 coches y los vendo genero una media de 14 ó 15 millones de euros en divisas para el país que entran por los clientes extranjeros.

-¿Por qué se puede adquirir un coche que puede alcanzar 350km/h si no hay carreteras que permitan esas velocidades?
-Sí que las hay pero hay que encontrarlas. A veces no es sólo por la potencialidad del vehículo -en este caso es un coche de lujo adaptado a cada cliente-, sino por el placer que supone poseer un coche de estas características y presumir ante los demás. Cada unidad puede costar entre 530.000 euros más impuestos en España, ó 1.400.000 euros por tasas de aduanas. Y los compran.

-Deme envidia y enumere las características de su ojito derecho...
-Está en línea con los deportivos italianos con motor central. El corazón es un V10 de origen pero con un compresor que rinde 820 caballos. La potencia se transmite a las ruedas con una aceleración de 0 a 100 km/h en 2,9 segundos y puede superar los 350km/h. Dispone de numerosas patentes, como su techo acristalado con un sistema exclusivo de opacidad e iluminación.

-¿Hasta qué punto su tecnología revoluciona el mundo del automóvil?
-Para el chasis utilizamos tecnología aeroespacial en fibra de carbono con uniones patentadas de titanio. El techo tiene un sistema exclusivo de opacidad e iluminación, los parasoles están integrados en el cristal...

-¿Por qué le dio por crear una empresa sólo para ricos?
-Lo que hice fue una empresa tecnológica para generar dinero y riqueza al país. Me da igual fabricar para ricos que para pobres. Ahora estamos con esta serie, pero tenemos proyectos para generar otros productos. El dinero lo obtenemos de los ricos para los pobres que trabajamos en la empresa. Este es un proyecto para que circule el dinero.

-Si apostamos por la Fórmula 1 en Valencia ¿por qué no por los superdeportivos de lujo?
-Eso se lo pregunta a los políticos y de paso que contesten por qué se gastan el dinero en espectáculo y no en industria y tecnología que genera puestos de trabajo continuos.

-¿Los coches acabarán conduciéndose solos?
-Seguro. Nosotros podríamos hacerlo ya, pero es un proyecto ligado a la modificación de las infraestructuras de una ciudad. Pero ocurriría lo mismo. Fabricar un coche no es sólo por vendérselo a un rico y ganar dinero sino que demuestra la capacidad tecnológica que hay en estas cuatro paredes. Lamentablemente los políticos utilizan esta clase de palabras, pero sin apoyar a la industria.

-¿Por qué eligió el mundo del motor?
-Porque por circunstancias familiares tuve que dejar los estudios y empezar a trabajar con 13 años en un taller de mecánica. Fui conociendo este mundillo y me enganché. Llevo más de 30 años. He trabajado para marcas como Ferrari y Hiunday y he participado y ganado varios campeonatos internacionales. Este es mi mundo y lo conozco bien.

-¿Nunca pensó en dedicarse a otra actividad?
-Viendo los palos recibidos ahora sí lo haría. De todos modos estoy ante ese dilema porque irnos a Jordania supone cambiar un medio de vida que conservo y frecuento desde que tenía ocho años. Cambiar mi paella de los domingos por ser rico no me compensa.

-¿Qué carretera le gusta más para conducir?
-La de montaña donde puedes disfrutar conduciendo el coche.

-¿Cuándo no habla de coches de qué habla?
-De coches. De política... me enfado con ellos... De cualquier cosa. De deporte. Ahora he vuelto a practicarlo con mi hijo.