VALENCIA (VP). Nuevo -y duro- revés el que recibieron ayer los sufridos accionistas del Banco de Valencia (BVA), cuyos títulos sufrieron un desplome de un 8,82% únicamente superado por el 12,34% de Gamesa, que acusó las malas perspectivas de negocio para este año, y por el 9,09% de Sacyr Vallehermoso donde contribuyó las fuertes ventas realizadas por Bankia Bolsa, con un saldo neto vendedor de 361.041 acciones.
Las tres cotizadas lideraron los descensos de todo el Mercado Continuo donde la cara de la moneda fue Renta Corporación, cuyas acciones se dispararon un 12,66%, que atraviesa por uno de sus mejores momentos en el parqué aunque muchos lo atribuyen a un mero calentón inmobiliario.
Todo lo contrario que BVA, que ayer cerró en los 0,31 euros, un nivel que muy pocos recuerdan, ni siquiera los accionistas más veteranos que por cierto no son pocos. La fuerte caída vino acompañada por un volumen de 2,10 millones de títulos, superando así la media diaria anual de los 1,8 millones según los datos de Infobolsa.
Al frente de las ventas netas se situaron los operadores de la mesa madrileña de Banco Espirito Santo, con 269.455 acciones y ninguna compra realizada. A continuación se dejaron ver los de Deutsche Bank Madrid (-208.336) y Morgan Stanley Madrid (-159.998).
En el otro lado de la balanza, los operadores de Barclays Bank Madrid, con 213.536 -y ninguna venta- llevaron la voz cantante, secundados por BBVA Bolsa Valencia (+161.898) y Santander Bolsa Madrid (+130.943). A destacar las compras de Nordkapp Inversiones Valencia -el broker del banco-, con un saldo neto comprador de 51.987.
"Lo único positivo que veo en la cotización del Banco de Valencia es precisamente que esté cotizando, puesto que con todas las noticias que están saliendo muchos pensábamos que iban a suspender el valor en bolsa, tal y como sucedió con la CAM", advierten desde una conocido gestora de fondos madrileña. "¿El futuro? Nadie sabe lo que va a pasar porque todo está en manos del FROB", añaden.
UN VOLUMEN A LA BAJA
Lo que sí que se sabe es que la negociación se está reduciendo en las últimas sesiones, síntoma evidente de que la especulación de turno no tiene tan claro lo que puede suceder con el banco. "Es verdad que ha caído el volumen, pero no conviene relajarse porque se trata de un valor tremendamente volátil a la vista de la situación por la que atraviesa".
Mientras el volumen va a menos, el préstamo de acciones -la antesala de las posiciones cortas- va a más.
De hecho desde que la pasada semana la CNMV levantara el 'veto bajista', el préstamo se ha elevado un 3,3% hasta los 16,57 millones de títulos, lo que representa el 3,3% del capital social. Un capital del que el 1,53% sigue estando en manos de los especuladores de turno.
Con estos números, BVA presenta una caída anual redonda del 50%, mientras que su capitalización se reduce hasta los 153 millones de euro situándose entre La Seda (163 millones) e Iberpapel (151 millones), uno de los históricos 'chicharros' de la renta variable española.
No es cuestión de que nos engañemos con utopías y patriotismos. Los tiempos han cambiado la realidad valenciana, y de lo que fuimos ya nada queda. Pero tengan presente que lo que ahora le ocurra al Banco de Valencia, eso será lo que le ocurrirá a toda la economía valenciana. Y si me lo permiten, y no se ofendan, a toda la economía española. Aquí los primeros mafiosos del país son los políticos. So. Andrés Castellano Martí.
Espero la sociedad valenciana no olvide a quien nos ha dejado a los pies de los caballos. Esta comprometida situación también la tendrían otros si fueran abandonados de la misma manera.Un saludo.
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