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MADRID (EP). El presidente de la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (Ganvam), Juan Antonio Sánchez Torres, ha asegurado que durante el pasado ejercicio se perdieron en España un total de 5.000 empleos y se cerraron 500 pequeñas y medianas empresas en el sector de la distribución de automóviles.

Sánchez Torres, que hizo estas declaraciones con motivo de la publicación de los datos de matriculación de 2011, indicó que el pasado ejercicio fue un año "para olvidar" que marcará "un triste hito" en el sector del automóvil en España, como ya ocurrió en 1993.

No obstante, indicó que el sector, como entonces, cuenta con potencial suficiente para recuperarse y seguir adelante, a pesar de la fuerte caída de ventas experimentada. El año pasado se vendieron en España 808.059 unidades en 2011, lo que se traduce en un retroceso del 17,7% y supone situarse en niveles cercanos a 1993.

Así, el presidente de Ganvam afirmó que las entregas de automóviles del año precedente "muestran cómo la crisis de confianza y la restricción crediticia continúan lastrando el mercado, principalmente el canal de particulares".

En esta línea, resaltó que la caída de las ventas a particulares fue mayor de lo previsto, a pesar de las promociones de hasta 4.000 euros que llevaron a cabo los concesionarios. Además, apuntó que el automóvil "es un sector corcho", ya que es muy dependiente de la situación económica, por lo que esta tendencia bajista "no se debe tanto a problemas internos de esta industria".

Sánchez Torres recordó que, desde que se iniciara la crisis, en España se han perdido 40.000 puestos de trabajo y se han cerrado 2.500 pymes en España. Por ello, apuntó que el nuevo Gobierno "deberá tomar cartas en el asunto para contener esta hemorragia".

LA LEY DE DISTRIBUCIÓN, UNA PRIORIDAD

En su opinión, la solución pasa por aprobar un plan de ayudas basadas en el achatarramiento, similares a las del Plan 2000E, lo que permitiría reactivar el consumo y rejuvenecer el parque español. Además, señaló que esta medida "no es incompatible" con las medidas de contención del gasto público, ya que su coste quedaría compensado por los impuestos generados de las ventas de coches.

Por otra parte, el máximo responsable de la Asociación afirmó que la conversión de la cartera de Comercio en una secretaría de Estado adscrita al Ministerio de Economía "servirá para que los vendedores sepan por fin quién les representa" y resaltó que la aprobación de la Ley de Contratos de Distribución "debe ser una prioridad" para el Ejecutivo.