MADRID (EP). El presidente de la CEOE, Juan Rosell, ha advertido este miércoles de que España se encuentra "en peligro", por lo que ha instado a reconducir rápidamente la situación para evitar males mayores.
"O reconducimos la situación o nos vamos a situaciones muy difíciles y complicadas", ha alertado el dirigente empresarial durante un desayuno informativo en el Fórum Europa, que contó también con la presencia del presidente de Bankia, Rodrigo Rato.
En cualquier caso, Rosell indicó que España no afronta un "día cualquiera", porque se han celebrado unas elecciones que ha calificado de "decisivas".
El presidente de la CEOE reconoció que la tarea que tiene por delante el nuevo gobierno es "tremendamente difícil", y dijo que en primer lugar tendrá que contar la "cruda realidad" y "no hacerse trampas en el solitario". Una vez hecho el diagnóstico, instó a establecer "urgencias" en el "cortísimo y medio plazo".
En su opinión, el camino ya fue trazado por el presidente del Gobierno en funciones, José Luis Rodríguez Zapatero, en el decreto que recortaba el sueldo a los funcionarios y congelaba las pensiones. "Ahora que está de moda meterse todos los días y desde todas las direcciones con Zapatero, yo voy a decir que desde mayo de 2010 fue el impulsor de algunas reformas que más fuera y mucho menos aquí se empiezan a ver como positivas", añadió.
Así pues, dejó caer que estas medidas de choque serán difíciles y que "cada cual debe aportar en función de sus capacidades". "Todo el mundo debe contribuir y nadie debe estar a la defensiva", afirmó Rosell.
Concretamente, el presidente de la patronal, que se mostró más moderado en sus propuestas de lo esperado, apuestó por "priorizar" tres cuestiones: los cambios en la regulación del mercado laboral, la reducción del gasto en las administraciones públicas y la mejora de la liquidez de empresas y familias.
EXPONER ACUERDOS PUNTUALES CON LOS SINDICATOS
En primer lugar, y en presencia del secretario general de CC.OO., Ignacio Fernández Toxo, Rosell apostó por modernizar la regulación laboral, introduciendo "más simplicidad" en la contratación, más "flexibilidad en el día a día de las relaciones laborales" y un coste por despido en la media de la UE.
Consciente de la conveniencia de alcanzar acuerdos en esta dirección con los sindicatos, Rosell ofreció a las centrales que "esta mañana, esta tarde o la próxima semana" los agentes sociales hagan públicos una serie de "acuerdos puntuales" que, según aseguró, han alcanzado durante las distintas negociaciones en los últimos meses, para generar confianza.
Rosell, que no quiso concretar cuáles son estos acuerdos, aseguró que existen "puntos de encuentro" con los sindicatos en relación con el reparto en el calendario de los días festivos o sobre la solución extrajudicial de conflictos. "Tenemos puntos de encuentro y no podemos esperar más para decirlós, aunque sean pequeños. Así ganaremos décimas de competitividad", añadió.
MENOS POLÍTICOS Y MEJOR PAGADOS.
Por otro lado, Rosell reiteró la necesidad de reducir los empleos públicos y llamó a introducir criterios de competencia en la Administración: "Hay que gestionar el sector público como si fuera una empresa, con incentivos y sin relajación", llegó a decir.
Si bien, consideró necesario volver a reformar el sistema de financiación autonómica, preservando idéntica cobertura para todos los ciudadanos en materia de educación, sanidad y servicios sociales. A partir de ahí, abogó por que cada comunidad pueda gestionar sus presupuestos como considere conveniente.
Antes de cerrar este capítulo, Rosell aseguró que "a ciertos niveles de responsabilidad los políticos están mal pagados". "Si queremos a los mejores deberíamos plantearnos seriamente su salario, desde que llegan hasta que se van. Así que menos políticos y mejor pagados", apostilló.
En cuanto a la "inaguantable" falta de liquidez, Rosell tomó como ejemplo la actuación de la FED, que "inundó de dólares" la economía estadounidense, si bien, en el caso de España, también urgió a culminar la reestructuración bancaria.
LA UE ERA TODO FACHADA
Por otro lado, el presidente de la CEOE no ha escatimado en críticas al actual diseño de la UE y el euro, que, en su opinión, ha resultado ser únicamente una "fachada". Sin embargo, advirtió de que "romperla (la zona euro) en mil pedazos sería un mal mayor que el que tenemos ahora".
Rosell apostó por reformar los "mecanismos de cohesión" para dar "credibilidad" a la deuda conjunta de la UE y por reforzar la gobernanza europea. "Hay que crear instrumentos que obliguen o sancionen para que nadie se salga de lo que se tiene que hacer", afirmó, antes de mostrar también su "limitada confianza" en las tres grandes agencias de rating a la vista de sus errores.
En este punto, aprovechó para poner en valor que "España es uno de los países que más ha cumplido", como demuestran, a su juicio, los excesos de déficit en los que han incurrido grandes economías como la francesa en el pasado o la actual ratio de deuda pública de Alemania, que es superior a la española.
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