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VALENCIA (VP). Mucho van a tener que cambiar las cosas en las siete semanas que quedan para finiquitar el ejercicio bursátil para poder enderezar el rumbo bajista y, sobre todo, para devolver la confianza a los sufridos bolsistas. Pocos son los analistas que se atreven a aventuar la aparición del típico rally de fin de año y los que lo dicen lo hacen con la boca pequeña, dado el estado en el que se encuentran los mercados de valores.

Muy especialmente los europeos, sin duda afectados por la 'perenne' crisis de deuda periférica, y como muestra un botón: apenas siete valores del Euro Stoxx50, el índice de referencia de los valores denominados en euros, logran presentar ganancias en las últimas 52 semanas.

Y, curiosamente, dos de ellos llevan colgada la etiqueda de 'made in Spain': Inditex, que con una revalorización del 16,15% se sitúa en el tercer puesto del escalafón, y Repsol (+12,85%), cuyo 'megadescubrimiento' en Argentina le está dando alas y ocupa la cuarta posición del ranking.

Por encima de las dos cotizadas locales figuran dos compañías alemanas como son el fabricante alemán de software SAP, que se revaloriza un 20,05%, y la celebérrima firma de automóviles Volkswagen, que se anota una menora del 18,64%.

Completan el cartel de compañías inmunes a la maltrecha coyuntura actual -o por lo menos eso es lo que reflejan sus cotizaciones- el fabricante holandés de productos de consumo y alimentación Unilever (+10,79%), el no menos conocido fabricante germano de coches de alta gama BMW (+7,92%) y la popular multinacional francesa de alimentación Danone (+5,03%).

Siete empresas de las cincuenta que dan vida al barómetro de la renta variable de la Eurozona, lo que deja bien a las claras la situación por la que atraviesan los parqués del Viejo Continente.

LA BANCA EUROPEA, MUY CASTIGADA

Ni que decir tiene que entre las mayores pérdidas a lo largo de los últimos doce meses aparecen firmas del sector bancario, pero sin embargo la peor parada de todos los valores del Euro Stoxx50 es el grupo francés especialista global en gestión de la energía Schneider Electric -el mismo que hace unos meses compró la española Telvent desembolsando 950 millones de euros-, cuyos títulos retroceden un 60,09%.

Tras ella aparecen viejos conocidos de la banca como son Societe Generale (-55,02%) y Unicredito (-51,98%), secundados por el gigante galo de la distribución Carrefour (-46,41%) y el de la telefónia móvil Nokia (-45,36%).

Tras la finesa figura la siderúrgica ArcelorMittal (-45,16%), la banca italiana Intesa San Paolo (-45,01%), la eléctrica alemana RwE (-39,95%) y el gigante francés de la banca BNP (-38,80%). 

El resto de cotizadas españolas -obviamente al margen de las ganancias que mantienen Inditex y Repsol- presentan descensos interanuales de diverso calado, pero bajistas al fin y al cabo. Así, los títulos del Santander ceden un 30,54%, los del BBVA un 23,66%, las antiguas 'matildes' -Telefónica- se dejan en el camino un 21,22%, mientras que Iberdrola recorta un 14,61%,