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VALENCIA (VP). Cajamar Caja Rural, la cabecera del Grupo Cooperativo Cajamar integrado por Caja Campo, Caja Rural de Casinos, Caixa Albalat, Caixapetrer, Caixa Turís, Caja Rural Castellón y Caja Rural Canarias, ha lanzado una emisión de cédulas hipotecarias a diez años por un importe de 500 millones de euros, que devengarán un interés fijo anual del 5,50%, es decir, 5.500 euros por cédula hipotecaria pagadero por anualidades vencidas los días 25 de octubre de cada año hasta 2021.

Sin embargo, dicha emisión no ha ido a parar a minoristas ni a inversores institucionales sino que se la va a quedar en cartera para utlizarla como colateral o garantía ante el Banco Central Europeo (BCE) a la hora de pedir dinero a la autoridad monetaria de la Eurozona, según fuentes financieras consultadas por este digital.

De hecho, la emisión se ha desembolsado al 100% y los mercados mayoristas continúan cerrados a cal y canto. Además, las mismas fuentes han advertido a Valenciaplaza.com que lo normal es no tener una emisión sobrecolaterizada tanto tiempo. "Los normal son tramos más cortos y en todo caso volver a emitir".

Cajamar emitió cédulas hipotecarias por primera vez en su historia hace exactamente dos años, cuando sacó al mercado 750 millones de euros de este tipo de activos, pero lo hizo a cinco años (octubre de 2014) y a un interés del 3,50%.

La suscripción tuvo lugar en un 65% en España y el restante 35% en el exterior, del que la mayor parte correspondió a inversores de Alemania, United Kingdom, Francia y Holanda. El precio de la colocación de fue de 85 puntos básicos sobre midswap, la referencia que se utiliza en este tipo de emisiones.

Las cédulas hipotecarias son activos financieros o títulos de renta fija, tal y como lo define el Banco de España, que se emiten con la garantía de la cartera de préstamos hipotecarios de la entidad de crédito emisora. Estos activos se han convertido de un tiempo a esta parte en la llave que abre las puertas de liquidez de las entidades financieras, muy especialmente de las españolas, de la autoridad monetaria.

Así, por ejemplo, Caja Mediterráneo (CAM) lo ha hecho en varias ocasiones este año. Como también Bancaja lo hizo a principios de ejercicio, pero con la particularidad que no las metió en su activo y sí en el del Banco Financiero y de Ahorros (BFA). Asimismo, Caja Madrid hizo lo propio, pero en los tres casos (CAM, Bancaja y Caja Madrid) se trataba de emisiones a dos y tres años.