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VALENCIA (EFE). El central francés del Valencia, Adil Rami, vio la cartulina roja directa una vez concluido el encuentro que su equipo empató a uno en Mallorca por insultar al árbitro, según refleja el acta del encuentro dirigido por el colegiado José Luis Paradas Romero.

Según recoge el acta, "una vez finalizado el encuentro y estando en el terreno de juego se dirigió hacia mi el dorsal nº 4, Don Adil Rami, realizándome una protesta por lo que fue amonestado" y a continuación el árbitro añade que Rami se le dirigió una vez fue amonestado, "empleando los siguientes términos:"¡Tu puta madre!",por lo que fue expulsado con roja directa".

Rami había sido el autor del gol del Valencia en un partido en el que su equipo se adelantó en la primera mitad, pero en el que recibió el gol del empate tras una mano de Mehmet Topal que el árbitro consideró penalti cuando ya se disputaba el tiempo de prolongación del encuentro.

El internacional francés era el único jugador del Valencia que había disputado hasta el momento todos los minutos de su equipo en competición oficial.

EL VALENCIA ACUMULA TRES 'AUTOEXPULSIONES' EN CUATRO PARTIDOS 

Los insultos al árbitro o al asistente de Adil Rami y Jordi Alba o la agresión repelida por Aritz Aduriz han provocado tres "autoexpulsiones" de jugadores del Valencia en los últimos cuatro partidos, sin que en ninguna de estas situaciones haya estado el balón de por medio.

La última de ellas fue la sufrida el sábado en Mallorca por el central francés Adil Rami, quien con el encuentro ya concluido insultó al colegiado del choque, José Luis Paradas Romero.

En el partido anterior, ante el Granada, el Valencia no sufrió ninguna expulsión, pero sí que las vivió en los dos encuentros precedentes.

Jordi Alba debió cumplir dos encuentros de sanción por insultar a un asistente en los minutos finales del partido Valencia-Barcelona, mientras que Aduriz vio el camino de los vestuarios por repeler una agresión de un rival en el Sevilla-Valencia.

Estas acciones en las que los futbolistas ven cartulinas amarillas o rojas por acciones ajenas al desarrollo del juego son calificadas con frecuencia por los técnicos como "autoexpulsiones".