VALENCIA. (Fotografías de Eva Máñez, a excepción de la de Alejandro Resta, de VFW)
ALEJANDRO RESTA
Rompió el hielo, muy madrugador él, Alejandro Resta. Los patrones varoniles se cuelan de nuevo en el armario femenino. El clásico esmoquin masculino que ya en su día Yves Saint Laurent revisitó, le sirve a Resta como "pegajosa" referencia dominante. Juega a la rigidez inglesa, sin caer en las dominatrix, y el romanticismo clásico de libro. Retro es la clave, y lo lleva al máximo esponente.
Yeah! El total look en agua marina. Este chico promete.
¡Glups! los excesivos complementos dorados.
JUAN VIDAL
Y llegó él. Juan Vidal, la gran esperanza blanca de la moda valenciana. Como en cada una de sus presentaciones la grada se puso del revés. Vidal representa la contemporaneidad (bien entendida) pura: estructuras actuales, actitud elegante, y mucha sexualidad no siempre contenida. Es el poder de lo autorreferencial. Con la mirada puesta en el cine de los 60 y 70 de Polanski o Pasolini y en la ironía de baja intensidad, el diseñador vistió la pasarela de colores chicle, brillo y cierta perversión. Con permiso de Miuccia Prada, Vidal se detiene en una mujer que redescubre su inocencia y frescura, pero enlazados de forma desconcertante con cierta madurez sexual y una inevitable rivalidad femenina.
Yeah! Lo hizo, lo hizo de nuevo.. Juan Vidal vuelve a ser el protagonista absoluto de esta pasarela. Hello Kittie, Hello Vida.
¡Glups! Vidal se crece con los tejidos más difíciles. El algodón le engaña.
El tweet @mamendiazalersi: "La Kittie de Juan Vidal tiene un toque dulce, pero perverso"
SIGLO CERO
A continuación, Siglo Cero se escapó, con desigual fortuna, a la región de la fantasía épica. Menudo juego de tronos. Su colección "Lady Ginebra", bebe (perdón por el juego de palabras tan obvio) de las leyendas medievales que sobreviven en la actualidad y pueblan nuestras tradiciones de castillos encantados, princesas y brujas, hechiceros y dragones y caballeros andantes. A destacar: los vestidos largos resueltos en capas desiguales, escotes en la espalda, y el negro (omnipresente) y el rosa palo dominando la aventura cromática. Ropa para potenciales Daenerys Targaryen.
¡Glups! El vestido rosa con capucha con el que abrió el desfile. Nunca ese color había resultado tan tenebroso.
Yeah! las piezas resueltas en negro. Elegancia medieval.
El tweet @ladygrett:"Musicón en #siglocero"
BIBIAN BLUE
"El mundo es un lugar oscuro" Lagerfeld dixit. El estilo burlesque, dramáticamente gótico y algo fetichista protagonizó el desfile de la diseñadora Bibian Blue. Excesivos volúmenes que mutan víricamente tanto en faldas como en mangas, con estructuras caóticas y (muy) reforzadas. Las gasas, el tul y el raso se combinan escénicamente con las pieles metalizadas, las plumas de pavo real y pedrerías vintage. Con el azul plomo y los violetas, rosas y malvas como denominador común de la paleta. Naturaleza nocturna y flores de cristal. Un trabajo que recuerda mucho al de Maya Hansen y al de Carlos Haro.Pues eso.
¡Glups! Hay un momento de cabaretera de saloon muy "Cowboys vs. Aliens"
Yeah! El exceso también hay que saber llevarlo
El tweet @franchejo: "en ocasiones veo Maya Hansen en #vfw"
JAIME PIQUER
Jaime Piquer traza con certero patronaje una colección tribal retrofuturista que se apunta al patchwork como tendencia (pre)dominante. Efectos pictóricos en tricolor en los que se funden corte y estética, jugando con la geometría, la perspectiva y la utilización de colores vivos ( verdes, amarillos, y rosas) para conseguir el preciado "remiendo artesanal". Minivestidos, transparencias, tules y gaseado.
¡Glups! El salvajemente tribal estilismo
Yeah! Los cortes geométricos y formas excesivas
El tweet @maytedlaiglesia "No os da un look muy invernal este desfile de Jaime Piquer?"
ALEX VIDAL
Vidal, Alex cerró, como es habitual, la segunda jornada. Alex se sube al carro tendencioso de Miuccia Prada y homenajea al Mondrian (1965) de Yves Saint Laurent. La referencia-de-la-referencia-de-la-referencia-de-la-referencia... hasta el infinito y más allá. Vidal desarrolla el patronaje arquitectónico en abrigos, chaquetas, cuerpos y vestidos, estos siempre con forma evasé inspirados en la ingeniería de Courreges y las composiciones de Mondrian. Alex deja la manida "T" por la más actual "A". Siluetas de inspiración piramidal, cortes angulosos y potencia las curvas de la cintura. Colores vivos como el cyan, el fucsia y el naranja para generar contrastes con el blanco y el negro, buscando la luz en el color como medio elemental de expresión y dando lugar a diseños multicromos. Muy acertada, e interesante, su incursión en el trabajo en piel y napa. A seguir.
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