LUIS A. TORRALBA. 26/07/2011 El ratio de las tres duplica al del banco presidido por Rodrigo Rato, según los datos consolidados de la CECA del primer trimestre de 2011, teniendo en cuenta la inversiones inmobiliarias, activos no corrientes en venta y existencias del balance en comparación con los créditos a la clientela de la inversión crediticia

imprimir

Comparte esta noticia

• Tweet
• meneame

Otras noticias

• Bankia está para comprar en bolsa
• ↑ AL ALZA
  Fidelity duplica su peso en Cellnex
• Ayco, participada por la valenciana Onofre Miguel, necesita más capital para sobrevivir

VALENCIA (VP). Unnim, la caja que integra Caixa Sabadell, Caixa Terrassa y Caixa Manlleu, es la caja de ahorros española más expuesta al 'ladrillo' al cierre del primer trimestre de 2011, según los datos consolidados de la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA) publicados el pasado viernes. Su ratio se situó a 31 de marzo pasado en el 13,94%, más del doble de la media de las cajas que alcanzó el 5,83%.

Los datos de la patronal del sector incluyen ocho grupos y otras tantas entidades que continúan en solitario, salvo los casos de la CAM, CajAstur, Caja Cantabria y Caja Extremadura, dado que según confirmaron fuentes de la CECA a este diario todavía no han recibido las cuentas tras la ruptura del Banco Base, que dejó por un lado a la caja alicantina y por otro Effibank, el banco que agrupa a las otras tres cajas.

Para obtener la exposición al 'ladrillo' se han tenido en cuenta los tres epígrafes del balance donde la banca almacena sus activos inmobiliarios (inversiones inmobiliarias, activos no corrientes en venta y existencias). Son tres cuentas que comparados con la inversión crediticia, concretamente con los créditos a la clientela -por aquello de que más de dos tercios de la partida de inversión crediticia del sector de las cajas está ligada a inmuebles-, reflejan a ciencia cierta el porcentaje que tiene cada entidad de inmuebles en propiedad por promociones propias, adjudicaciones y daciones en pago.

Pese a las 'recomendaciones' del Banco de España para que las cajas ganen una mayor transparencia continúa echándose en falta dos datos determinantes: el ritmo de entradas en morosidad y el ritmo de recuperaciones. Sin duda, aspectos determinantes para conocer hasta qué grado las entidades han ido aligerando el imacto del 'ladrillo' sobre sus balances.

Tras Unnim se sitúa a muy poca distancia otra caja catalana, CatalunyaCaixa -la suma de Caixa Catalunya, Caixa Tarragona y Caixa Manresa, cuyo ratio se elevó hasta el 13,33%; mientras que el cajón lo completa la Kutxa, con un 9,79%.

Bankia/Banco Financiero y de Ahorros (BFA) ocupa el cuarto puesto del ranking, con un ratio del 5,42%, pero liderando las partidas de activos no corrientes en venta -daciones en pago de inmuebles- e inversiones inmobiliarias puras, con 6.049,28 y 2.146,52 millones de euros respectivamente, mientras que en existencias dentro del epígrafe de resto de activos ocupaba la segunda posición con 3.168,65 millones de euros, superado por CatalunyaCaixa con 4.626,35 millones, según los datos de la CECA.

BANKIA, CON MANDO EN PLAZA

El banco presidido por Rodrigo Rato lideraba también el ranking del crédito a la clientela dentro del apartado de la inversión crediticia del balance consolidado, con 209.807,74 millones de euros. La Caixa era la caja que más se le aproximaba en dicho aspecto (180.320,06 millones), pero su ratio de exposición al 'ladrillo' era del 4,74%.

Entre Bankia/BFA y La Caixa se sitúan Mare Nostrum -Murcia, Penedés, Sa Nostra y Granada-, con un ratio del 5,39%; Novacaixagalicia -Caixa Galicia y Caixanova-, con un 5,37%; la BBK (5,04%); Banca Cívica -Caja Navarra, Caja de Burgos, Caja Canarias y Cajasol-, con un 4,74% -igual que La Caixa-; y Caja Tres -CAI, Círculo de Burgos y Badajos-, que compartieron el 4,72%.

Tras ellos aparecen el resto: Caja España, Salamanca y Soria (4,69%); Caja Vital (4,50%); Unicaja (3,83%); Caixa Ontinyent (3,63%); Ibercaja (2,88%); y Pollensa (1,30%), la única de todo el sector que, según los datos de la CECA, no contaba con existencia alguna al cierre del tercer trimestre, mientras que su exposición al 'ladrillo' se limitaba a 1,21 millones de euros en activos no corrientes en venta y 2,50 millones en inversiones inmobiliarias.