30/04/2011

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VALENCIA. Empezó su temporada 2011 en la Patogonia donde se preparó a conciencia para cumplir su sueño: ser campeón del mundo en motociclismo. Nico Terol (Alcoy 1988) a sus 23 años es un joven con las ideas claras que reconoce cuáles son sus puntos débiles y trabaja intensamente con planes especializados y personales para ser un piloto más completo. Nico Terol corre en 125cc con el equipo Bankia Aspar Team. Recientemente consiguió la segunda victoria de la temporada en la categoría de 125cc en el Gran Premio de España celebrado en el circuito de Jerez. En su tiempo libre sigue corriendo, pero sobre una bici o en participando en una maratón.

 
-¿Es reconocido como el piloto de Alcoy pero vive en Bocairent?
-(Risas) Lo he explicado alguna vez, nací en Alcoy, pero tengo mi vida en Bocairent donde vivo con mis padres en una masía en la montaña. Es mi lugar ideal. Me gusta más que vivir en la ciudad.

-Aspirar a ser campeón del mundo ¿es un reto a los 23 años?
-Me he preparado para ello. La pasada temporada pese a subir catorce veces al pódium soy prudente porque cada año es distinto. Mi objetivo es luchar y conseguir más victorias y ser campeón del mundo al finalizar el curso.

-¿A qué velocidad ha llegado a poner una moto de calle o competición?
-Con la Aprilia 125 cc de competición en Australia he llegado a coger 248 km/ hora. ¡Una pasada para una 125! De todos modos no me gusta correr en moto por carretera. De hecho no tengo carnet. Correr en los circuitos es otra cosa.

-Su primer circuito fue a los 11 años, ¿no fue un poco pronto?
-No. Siempre quise ser piloto de motos. Mi padre y mi tío eran aficionados y desde pequeño es lo que viví. Más tarde fue una oportunidad participar en la cuna de campeones y sabía que lo tenía que aprovechar.

-O sea, que en su caso siempre supo que lo suyo iban a ser dos ruedas, ¿no?
-Sí, desde pequeño he tenido bicis y motos entre las piernas. Me encantaban y buscaba cualquier oportunidad para andar siempre con una bici o una moto de aquí para allá. Actualmente tengo una scoot de montaña Spark y una scoot de carretera.

-No tiene carnet de moto, pero ¿y de coche?
-Sí, pero me gustan los utilitarios pequeños. No me gustar correr en carretera y además ahora no se puede.

-A Jorge Martínez Aspar no le gusta perder ni a las canicas, ¿y a usted?
-Lo llevo mal. De todos modos el año pasado aprendí mucho de la categoría y estoy convencido de que ese aprendizaje hizo que hoy en día sea mejor piloto.

-¿Para ser un buen piloto hay que ser muy cerebral?
-La fuerza mental es fundamental. Talento sin concentración es dispersar fuerzas y en una carrera no te lo puedes permitir. El talento sin concentración es un riesgo. En mi caso se ha establecido un tipo de entrenamiento especializado que combina pruebas, visualizaciones, motocross... que me han permitido trabajar bien el cuerpo a cuerpo, entre otras cosas. Hay que tener en cuenta que es muy difícil mantener la concentración cuando vas solo y tienes que estar muy atento para poder cambiar la táctica en cada situación de carrera. De todos modos este año me he estado mentalizando para conseguir ser más agresivo cuando se rueda en grupo y saber imponer mi carácter.

-¿Cómo evita ponerse nervioso antes de una carrera?
-Tengo mis rutinas. Entre ellas suelo escuchar música, me pongo mis canciones favoritas y disfruto muchísimo.

-¿Hay que ser humilde para llegar arriba?
-Sí, porque cuando te crees que eres el mejor empiezas a involucionar.

-¿Se ve en esta profesión toda la vida?
-Sí, las motos son mi vida. Me gusta mucho este mundo y todo lo que le rodea por lo que sé que continuaré en él encima o a pie de moto.

-¿Qué haría si no fuera piloto?
-Seguramente sería ciclista, me encanta la bicicleta. De hecho baso buena parte de mi entrenamiento en el ciclismo, bien sea de montaña o en ruta.

-Cuál fue su primera moto?
-Una Malagutti amarilla. Una scooter muy potente que me gustaba mucho.

-Para ser profesional en cualquier trabajo hay que invertir dinero. ¿Cuánto ha invertido usted?
-Bueno, aunque mi carrera deportiva no ha sido un camino de rosas, no he tenido que pagar por correr, como a veces les ocurre a muchos pilotos. Siempre he contado con gente alrededor que ha confiado mucho en mis posibilidades.

-¿Una frase que se repite a menudo?
-Hay que ir paso a paso y pensar en cada gran premio.

-¿En su vida personal hay tanto riesgo como en la profesional?
-¡Para nada! Fuera de las carreras soy una persona muy tranquila.

-¿Qué es más importante, ganar o perder?
-Bueno, en la competición cuentan las victorias, y yo siempre lucho para que así sea. Aunque a veces las derrotas también ayudan a evolucionar tanto en el plano profesional como en el personal. Por ejemplo me gusta ver las carreras que hecho en el viaje de vuelta a casa, ver fallos para poder mejorar.

-¿Con qué disfruta cuando no está subido a una moto?
-Yendo al cine con mis amigos, paseando por la montaña con mis perros, por los aledaños de nuestra casa. Y haciendo deporte, cualquiera, el deporte me gusta en todas sus vertientes.

-¿Qué opina de sus compañeros de edad que practican el botellón?
-Que para ser un buen deportista te tienes que alejar del alcohol. Y más cuando quieres ser un profesional en cualquier deporte y llegar a la cima.

-¿Los estudios se han quedado aparcados?
-Sí, me dedico al 100% a las motos. no obstante estoy estudiando inglés.

-¿La crisis ha tocado también el mundo de las motos?
-Afortunadamente es algo que de momento no me ha tocado de cerca, aunque no soy ajeno a ello, y a veces veo situaciones complicadas de gente que conozco.

-¿Su próxima meta?
-Portugal. Ir poco a poco, carrera a carrera, hasta conseguir el título de campeón del mundo de esta temporada.