29/03/2011 El presidente de la Generalitat catalana asegura que CiU "procurará" que el partido que gane las elecciones de 2012 "no tenga mayoría absoluta", ya que los planteamientos de los nacionalistas catalanes tienen más opciones de salir adelante en el Parlamento con "mayorías relativas"

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MADRID (EP). El presidente de la Generalitat catalana, Artur Mas, advirtió ayer de que CiU hará todo lo posible para que los resultados de las próximas elecciones generales no otorguen mayoría absoluta a ningún partido, con el objetivo de lograr la aprobación del pacto fiscal que propone para Cataluña. Al mismo tiempo, avisó de que sólo dará su apoyo "estable" al partido que salga vencedor de esos comicios a cambio de que su propuesta fiscal sea "tenida en cuenta".

En un desayuno informativo organizado ayer por el Foro Nueva Economía en Madrid, Mas explicó que CiU "procurará tanto como pueda" que el partido que gane las elecciones de marzo de 2012, sea PP o PSOE, "no tenga mayoría absoluta", ya que, según señaló, los planteamientos de los nacionalistas catalanes tienen más posibilidades de salir adelante en el Parlamento con "mayorías relativas".

"No estará en nuestra mano solamente, pero lo que esté en nuestra mano lo tenemos que manejar" para lograr una "aritmética favorable, ha subrayado, si bien ha especificado que, en caso de que alguno de los dos grandes partidos logre la mayoría absoluta, la Generalitat presentará la propuesta de pacto fiscal de todas maneras.

"Lo vamos a hacer delante de quien gane las elecciones. Gobierne quien gobierne. Y lo pondremos como condición imprescindible para nuestra implicación en la política española de forma estable. Si se quiere a CiU apoyando de manera estable, la condición es que nuestra propuesta sea tenida en cuenta", advirtió.

En cualquier caso, Mas remarcó que para que se den todas estas condiciones, primero tiene que haber el "máximo consenso posible" de las fuerzas políticas y de la sociedad catalanas para que, al presentarlo ante las Cortes Generales, sea "un objetivo compartido y un clamor".

GESTIÓN DE LOS IMPUESTOS

Para el presidente de la Generalitat, "hay una transferencia de gasto, pero no una corresponsabilidad importante a nivel de ingresos", por lo que su objetivo es "romper esa dinámica" desde Cataluña con un pacto fiscal que otorgue a la Administración autonómica la gestión de los impuestos que se pagan en la región, negociando "bilateralmente" la aportación al Estado "en la línea de la solidaridad y de las cargas generales del Estado que todos tenemos que compartir".

El presidente catalán considera que el déficit fiscal de Cataluña "no es perdurable" y manifestó su propuesta como solución a corto plazo, ya que "lo que no se puede pretender es que determinados territorios siempre vayan poniendo dinero encima de la mesa, sin ninguna consecuencia más".

Según explicó Mas, esta estabilidad parlamentaria a cambio del pacto no incluye formar parte del Gobierno central. Así, ha asegurado que, aunque no lo rechaza "como principio de base", no es uno de los objetivos de CiU, ya que "no es lo más importante" para su partido, pues sólo se plantea "intentar negociar con el Gobierno, sea del color que sea" para lograr la aprobación de su propuesta fiscal.

"A COLETAZOS Y OBLIGADOS"

En lo que respecta a las medidas económicas que viene adoptando el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero para hacer frente a la crisis, el presidente de la Generalitat considera que se empezaron a tomar tarde, si bien ha remarcado que es "mucho mejor que las haya a que no las haya".

Para Mas, la "sensación" es que las medidas comenzaron a tomarse "cuando ya no había más remedio y estaba a punto de tocar la campana", por lo que considera que se han adoptado decisiones "dando coletazos y obligados por las circunstancias".

Además, aunque subrayó que gracias a estas reformas "España está cada vez más separada de aquellos países que lo están pasando peor en la UE", Mas puntualizó que no se puede "cantar victoria antes de tiempo", por lo que reclamó al Gobierno "no bajar la guardia".

Una de estas reformas, la reducción del déficit de las comunidades autónomas del 2,4 por ciento en 2010 al 1,3 por ciento en 2011, el presidente autonómico cree que "solo hay una forma de hacerlo" y es "destrozándolo todo", por lo que aseguró que en Cataluña no se han "vuelto locos".

"La pregunta es cómo se pasa de 7.500 millones de euros largos a 2.600 millones. Nosotros tenemos un plan de ajuste serio del 10 por ciento. Pero lo que no vamos a hacer va a ser cerrar servicios públicos en Cataluña. Una cosa es hacer los deberes y otra volverse loco. No podremos cumplir de golpe en un solo año", explicó.

PRUDENCIA SOBRE LAS NUCLEARES

Por otro lado, Mas dijo ser "partidario" de no tomar decisiones "en caliente" acerca del futuro de las centrales nucleares a raíz de la catástrofe ocurrida en Japón tras el terremoto. A su juicio, "ahora es fácil apuntarse al golpe de péndulo", pero consideró que "hay que actuar con prudencia a pesar del impacto en la opinión pública". "Hay que asegurar la máxima seguridad y que los costes energéticos no se disparen", añadió.

En cuanto a la ubicación del Almacén Temporal Centralizado (ATC) de residuos nucleares, el presidente catalán señaló no estar en contra del mismo, aunque sí hizo hincapié en que "no se puede pretender acumular todas las instalaciones nucleares en el mismo territorio".