LUIS A. TORRALBA. 16/03/2011 Tal y como pasó en los días posteriores al terremoto de Kobe, el indicador español no sólo es el que menos ha cedido en las tres últimas sesiones (-0,66%) sino también el que más se revaloriza en lo que va de ejercicio (+4,77%) entre los principales índices bursátiles del planeta

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VALENCIA (VP). Apenas fueron 20 segundos, pero suficientes para causr el peor desastre en Japón desde el Gran Terremoto de Kanto, que en 1923 se cobró más de 140.000 muertos. Menos de medio minuto donde la ciudad de Kobe, una de las más productivas de Japón, vio como la tierra se abría a sus pies en la madrugada del martes 17 de enero de 1995. Dieciséis años después el país del sol naciente sufría la peor catástrofe desde la II Guerra Mundial donde el número de fallecidos y desaparecidos se cuenta por millares, mientras el pánico nuclear se ha apoderado del país.

Aquel 17 de enero de 1995 el índice de referencia de la Bolsa de Japón cerraba en los 19.241 puntos y una semana más tarde retrocedía un 6,13% hasta bajar a los 18.061 puntos. Un descenso ampliamente superado por el desplome que el Nikkei sufrió este pasado martes (10,55%), lo que supone la tercer mayor caída de toda su historia.

La fuerte caída del índice nipón durante la primera semana contrastó con los recortes que experimentaron los principales indicadores bursátiles del planeta. De hecho, los dos índices de referencia de Wall Street, el Dow Jones de Industriales y el Nasdaq Composite, registraron descensos del 1,73% y 1,16% respectivamente; el Euro Stoxx50 se dejó en dicho periodo un 1,97%; el FTSE 100 inglés un 2,78%; el Dax Xetra alemán un 3,16%; y, entre otros, el CAC 40 francés un 4,13%.

De puertas adentro, el Ibex 35 presentaba unos números rojos por valor de un 1,60%, la diferencia porcentual entre los 3.036,40 puntos con los que despidió la fatídica sesión del martes 17 de enero de 1995 y los 2.987,90 puntos con los que echó el cierre una semana después. Sin embargo, tal y como sucedió en la práctica totalidad de los índices mundiales, no tardó en llegar el típico rebote técnico que enjugó buena parte de las pérdidas que hasta ese momento cosechaban los mercados.

Pero, curiosamente, en el caso del indicador español el rebote fue a más, puesto que al término de dicho mes ya se situaba un 0,12% por encima del cierre del día del terremoto de Kobe. Ningún otro índice fue capaz de hacerlo. Tal y como está sucediendo estos días tras el nuevo desastre en Japón.

Así, el Ibex 35 sólo ha cedido un 0,66% desde la sesión del pasado viernes, mientras que el resto de índices presenta caídas muy superiores, que en muchos casos les han llevado a entrar en terreno negativo en el presente ejercicio. "Los valores que mueven al índice español, es decir, Santander, BBVA, Telefónica, Iberdrola y Repsol básicamente, no están precisamente expuestos a Japón, por lo que las pérdidas que acusan son propias del efecto contagio y poco más", advierte un gestor valenciano. "Nada que ver con las del Dax Xetra alemán, por ejemplo, que sí está muy expuesto porque se nutre de valores de sectores muy ligados a la exportación hacia Japón como automóviles y bienes de lujo", añade.

¡OJO CON LOS AGOREROS DE TURNO!

Desde una sala de bolsa valenciana advierten en no dejarse llevar por los momentos de pánico que se están viviendo en bolsa. "No es momento de vender y sí de comprar para mantener a medio/largo plazo porque los precios de muchos valores son de auténtica ganga. Además, de momento el Ibex 35 está aguantando sobre los 10.060 puntos y eso es una muy buena señal, pero aún perdiendo tal soporte tampoco habría que asustarse y en ningún caso dejarse llevar por los agoreros de turno".

Ni que decir tiene que el peor parado es el Nikkei japonés, cuyas pérdidas en tan sólo tres sesiones representan una caída de un 16,08%, lo que le han provocado unas minusvalías latentes en lo que llevamos de año de un 15,87%. El Xetra alemán ha cedido desde el viernes pasado un 4,78%, mientras que la rentabilidad anual arroja unos números rojos por valor de un 3,85%. Por su parte, el índice de referencia de la renta variable europea, el Euro Stoxx50, se ha dejado atrás un 3,16%, lo que se ha llevado las ganancias que venía presentando este año. El Cac 40 francés ha bajado un 3,76% y el cómputo anual arroja unos números rojos del orden del 0,63%.

Al otro lado del charco, con los datos a media sesión de ayer martes, el Dow Jones de Industriales recortaba un 2,05% desde el viernes aunque mantenía unas ganancias anuales del 1,88%; mientras que su compañero de fatigas del mercado tecnológico, el Nasdaq Composite, presentaba un descenso de un 2,23% pero todavía aguantaba en terreno positivo este año (+0,11%).