La agencia indica que la operación, cuyo valor rondará los 2.500 millones, tendrá efectos "marginales" tanto en la dilución de las acciones de Iberdrola como sobre el perfil crediticio de la compañía.
Según S&P, una parte significativa de la operación será financiada a través de la emisión de nuevas acciones de la eléctrica, lo que inicialmente se realizará mediante una ecuación de canje de 0,4989 acciones de Iberdrola por cada acción de Iberdrola Renovables.
Además, Iberdrola Renovables distribuirá un dividendo extraordinario por un valor equivalente al 40% de la transacción que, una vez entregado, elevará la deuda consolidada de la matriz Iberdrola en cerca de 1.000 millones de euros.
S&P recuerda que la absorción de Iberdrola Renovables es, junto a la compra de la brasileña Elektro, la segunda operación anunciada por la compañía presidida por Ignacio Sánchez Galán desde que el Gobierno puso en marcha las colocaciones del déficit de tarifa en los mercados, gracias a las cuales la compañía ha aligerado ya en 1.200 millones de su balance.
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