BILBAO (EP). La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Economía, Elena Salgado, prevé que en el segundo semestre de 2011 se "empezará a crear empleo neto", pero en cifras "todavía moderadas".
En una entrevista concedida al diario 'El Correo', recogida por Europa Press, Salgado ha indicado que el incremento del paro que se está registrando actualmente es "bastante estacional" y ha considerado que "las grandes cifras de variación de empleo ya las hemos dejado atrás".
Por otro lado, no cree que se vayan a imponer por parte del Estado medidas concretas de austeridad a las comunidades autónomas. "No veo que tengamos esa capacidad de acuerdo con la Constitución, más allá de lo que se refiere a los gastos de personal o los precios farmacéuticos", añadió.
Asimismo, ha reconocido que no se plantea un nuevo decreto de recortes y ha subrayado que el Gobierno Zapatero "tiene un presupuesto para 2011 muy austero, que cumple el objetivo de déficit", además de que en el Consejo de Ministros se han tomado "medidas para hacer un seguimiento de la ejecución presupuestaria mucho más detallado de lo que había sido hasta ahora, precisamente porque sabemos que la reducción del déficit que tenemos que hacer este año en el Estado es muy importante".
En cuanto a las medidas a adoptar ante una nueva crisis petrolera, Salgado cree preciso primero conocer los datos y ha considerado que "no hay razón para que nuestra intensidad energética sea un 20 por ciento superior a la de Italia". En su opinión, se debe "reducir la dependencia del petróleo porque es un combustible fósil, no renovable, que perjudica al medio ambiente y a nuestra factura exterior", así como "mejorar la eficiencia, y eso pasa por pequeñas actuaciones, por utilizar las renovables e incorporar los costes de la energía a los precios".
ELECCIONES GENERALES
En relación a las próximas elecciones generales, Salgado ha afirmado que "queda mucho partido de aquí a las generales" y ha destacado que el Gobierno socialista está "dando la cara, diciendo cuál es nuestra propuesta y exigiendo esfuerzos".
La ministra de Economía ha opinado que el Gobierno Zapatero y los socialistas tienen "una hoja de servicios muy buena para las elecciones". "Las reformas estructurales que hacemos son a medio plazo, aunque algunas van a empezar ya a surtir efecto. La reducción del déficit no es sólo una necesidad impuesta por nuestros compromisos europeos, sino una condición imprescindible para empezar a crecer, así que es un gran activo, igual que la contención de la deuda y las políticas sociales, que las hemos mantenido. Y no olvidemos las grandes reformas sociales de la anterior legislatura", ha subrayado.
CAJAS
Por otro lado, ha negado "trato discriminatorio" que favorezca a cajas catalanas frente al resto como han denunciado algunos grupos de cajas en reconversión. A su juicio, es "una mala alternativa hablar de un trato discriminatorio porque los hechos van a desmentir todas esas afirmaciones". En ese sentido, ha dicho que "cada entidad debiera estar preparando las acciones que necesita porque conoce perfectamente su situación, ya que ha sido ella la que ha dado sus datos al Banco de España" y ha recordado que "los test de estrés realizados el pasado julio ya pusieron de manifiesto la situación de algunos grupos".
Salgado ha insistido en que "aquí no hay nada que se esté haciendo a la medida de nadie" y ha considerado "esta historia de la discriminación es un argumento que no se tiene en pie". "Si las entidades, en vez de ser catalanas, fueran de otro sitio, nadie hubiera puesto esa acusación sobre la mesa, sinceramente lo creo", ha añadido.
Preguntada por si perderán arraigo social las cajas de ahorros, la vicepresidenta económica ha respondido que "una caja de ahorros intervenida y adquirida por otra en subasta ha preservado su obra social. Si hay que cerrar oficinas, habría que cerrarlas en todo caso. Y la función de acercar la banca a los lugares aislados, tradicional de las cajas, ya hace una década que la puede cumplir internet".
"Tenemos un sector financiero que desarrolló extensas redes de oficinas porque se nutría principalmente de las hipotecas del inmobiliario. Pero no vamos a volver a construir 700.000 viviendas al año, ni ahora ni dentro de diez años. Tenemos que acostumbrarnos a una velocidad de crucero de unas 350.000 y esa cifra es la mitad de las hipotecas que se suscribieron en 2007. Corregir el sobredimensionamiento de nuestro sistema de crédito lo hará más robusto de cara al futuro", ha advertido.
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