Las organizaciones sindicales y los empresarios se reunirán hoy para hablar de la negociación colectiva. El Gobierno advierte que legislará "si no hay consenso"

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MADRID (VP/EP). Los sindicatos CC.OO. y UGT se reunirán hoy con representantes de CEOE y Cepyme en la Fundación del Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA) para analizar la evolución del Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC), que mantiene cada vez más distanciados a los agentes sociales.

Uno de los principales problemas es el descontento de las centrales sindicales con la evolución de la negociación colectiva de este año, ya que, según datos de UGT, hasta octubre sólo se han cerrado el 46,46% de los convenios.

CC.OO. y UGT han denunciado en varias ocasiones que la patronal no está cumpliendo con el acuerdo de negociación colectiva para el periodo 2010-2012 tanto en relación a los criterios de política salarial como en materia de empleo.

Según las centrales, la resistencia empresarial a asumir sus compromisos se está traduciendo en un deterioro de las condiciones salariales pactadas y en una irrelevante incidencia en la estabilidad del empleo o en el freno a la destrucción del mismo.

A pesar de estas diferencias, lo más probable es que el encuentro se centre en la futura reforma de la negociación colectiva, que lleva meses atascada y para la que el Gobierno ha concedido un plazo de unos cuatro meses a los agentes sociales: hasta el 20 de marzo.

El propio presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha reconocido la poca confianza que tiene en la posibilidad de que haya acuerdo entre empresarios y sindicatos y ha asegurado que legislará si después de la citada fecha no hay consenso.

Los sindicatos han llamado al orden a la patronal en varias ocasiones para que se siente a negociar y critican el silencio de la CEOE al respecto, que está totalmente inmersa en el proceso electoral de su cúpula directiva.

EMPUJÓN A LA REFORMA Y AL DIÁLOGO SOCIAL

De esta forma, la reunión de hoy podría ser un buen momento para darle un empujón a la reforma, lo que podría servir también como un primer paso para reactivar el malogrado diálogo social, roto desde que el pasado mes de mayo el Gobierno aprobara la reforma laboral por decreto.

De hecho, la nueva secretaria de Estado de Empleo, Mari Luz Rodríguez, encargada de las relaciones con los agentes, ha mantenido ya contactos y reuniones con sindicatos y empresarios, aunque se han centrado en la reforma de las políticas activas de empleo y no en la reanudación del diálogo social.