Comparte esta noticia

• Tweet
• meneame

Otras noticias

• Heródoto, el clásico que nos enseñó a entender al otro
• Nolan, interesado en un remake ‘humano' de Akira
• Las óperas de Palermo y Montecarlo se suman al festival del Mediterráneo

VALENCIA. El IVAM debería haber pagado un 10% del dinero que finalmente abonó por las esculturas de Gerardo Rueda. Esa es la conclusión a la que ha llegado la contratasación encargada por el museo en relación al análisis de la gestión de la exdirectora del IVAM, Consuelo Císcar, y que ha hecho público el instituto este lunes.

En el estudio, realizado por los profesores de la Complutense Jaime Brihuega y Javier Pérez, se señala que "el precio de mercado para piezas de este tipo no debiera superar el 10% de lo que se pagó en su día".  Igualmente, se apunta que existe información sobre obras similares en año de realización y materiales de este autor, que han salido a subasta en los últimos años, pero no en cuanto a sus dimensiones que en este caso son muy superiores.

Del mismo modo, la comisión hace constar que las obras que adquirió el museo son "una copia póstuma y al mismo tiempo prueba de autor", una relación que no se acaba de entender bien, según señalan. Para las copias póstumas los especialistas reclamados por Intervención de la Generalitat estiman que "el precio de mercado para piezas de este tipo no debiera superar el 10% de lo que se pagó en su día".

En este caso se encontrarían esculturas Altamira (1973. Copia póstuma); Mural de construcción rusa I (1985. Fundición de 2006); Polar II (1979. Fundición de 2007); y Sin título (1970. Fundición de 2007). También sería el caso de la obra Gran relieve, la primera que compró el instituto, y por la cual se abonaron 360.000 euros, una cantidad que se abonó en dos partes: 207.803 euros con cargo al presupuesto de 2004 y 152.197 euros con cargo al presupuesto de 2005. En total por las siete obras de Rueda analizadas se pagaron 2,58 millones de euros.

La nueva contratasación ha analizado también más adquisiciones descubriendo un nuevo sobrecoste en la compra de una obra de Natividad Navalón. Se trata en concreto de La búsqueda del legado, un bronce niquelado de la escultora valenciana. En el informe se indica que por informaciones recabadas en la valenciana Galería Punto, que representa oficialmente a la artista, y teniendo en cuenta las dimensiones y el material, "el precio adecuado no debiera superar el 60% de lo que en su día se pagó".

La búsqueda del legado formó parte de la última exposición que ha realizado como comisaria la propia Císcar. La muestra, que se exhibió en el Centre del Carme a principios de año y tuvo un coste aproximado de 25.000 euros, fue abonada por la Fundación Jaume II el Just. La escultura de Navalón fue comprada por 36.300 euros, valor por el que está asegurada.

No todo son sobrecostes. La contratasación también ha analizado las adquisiciones de la obra Retrato de Marcel Duchamp por R. Mutt en 1917 de Jorge Ballester, cuyo precio, 12.100 euros, destaca el informe, "se ajusta a lo que el mercado establecería". Similar conclusión obtiene la comisión de una obra de Tania Blanco (Hummingbird song) o de dos obras de Daniel González, Niña con pelo a lo garçon y Maternidad de rodillas. La primera es un ejemplar de fundición de 1926 de una tirada muy reducida a partir del original en terracota. El IVAM pagó 25.000 euros por esta obra. La segunda es un dibujo de carbón sobre papel de 1920 por el que se abonaron 4.000 euros. En los dos casos, la comisión considera "ajustado el precio".

La adquisición de obras de arte y los sobrecostes que se han registrado en este asunto han motivado al sindicato UGT a elevar ante la Fiscalía Anticorrupción una denuncia para que analice "si de los hechos que se desprenden de la documentación existieran indicios racionales de criminalidad". El informe de Intervención de la Generalitat reveló más de medio centenar de irregularidades de todo tipo en la gestión del IVAM entre 2009 y 2013.

Noticias relacionadas

• José Luis Rueda: "Hice una oferta; que no la hubieran aceptado"