MADRID (EP). Realia celebrará hoy su junta general de accionistas, la primera después de que Carlos Slim se hiciera recientemente con el control de la inmobiliaria al cerrar la compra de la participación del 24,9% que Bankia tenía en la empresa.
El empresario mexicano es primer socio de FCC, grupo que a su vez es primer accionista de Realia con un 36,8% del capital, con lo que la toma de las acciones de la entidad financiera le da el control de la inmobiliaria.
Realia celebra asimismo su asamblea anual pendiente de la oferta de adquisición de acciones (OPA) que Slim ha formulado sobre el 100% de la compañía, actualmente pendiente de autorización por parte de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La OPA es competidora a la que la socimi Hispania presentó a finales de 2014. Una vez que el supervisor autorice la oferta de Slim, arrancará el plazo de aceptación simultáneo para ambas ofertas.
Por el momento, el empresario mexicano está ya presente en el consejo de administración de Realia, con un puesto que ocupa Gerardo Kuri, director general de inmuebles Carso, además de consejero de FCC y consejero delegado de Cementos Portland.
En la actualidad, están vacantes los tres sillones que Bankia ocupaba en el consejo de Realia, a los que la entidad renunció tras vender su participación.
POSIBLE ENTRADA DE SAREB
Entre el resto de asuntos de la asamblea destaca la aprobación de una ampliación de capital para dar la opción a Sareb a entrar en el accionariado de la empresa, con una participación máxima del 4,5%, mediante el canje por acciones de la inmobiliaria de los préstamos participativos que tiene concedidos a la empresa, que suman 57,5 millones de euros.
Realia también pedirá a su junta autorización para, si lo estima oportuno, ampliar su capital social en hasta la mitad de su dimensión actual y para emitir títulos de deuda en un plazo de hasta cinco años y por un importe máximo de 450 millones de euros.
La compañía celebrará su junta tras el vuelco registrado en la compañía desde comienzos de finales de 2014, cuando la socimi Hispania lanzó una OPA sobre la empresa y posteriormente Slim, tras convertirse en socio de FCC, manifestó su interés por la compañía.
Así, el grupo constructor decidió quedarse como socio de la inmobiliaria y no vender su participación, mientras en paralelo, el empresario mexicano pactaba la compra del porcentaje de Bakina y lanzaba su OPA competidora a la de la socimi participada por George Soros, una competición aún pendiente de dirimir.
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