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VALENCIA. En un entorno donde el descrédito avanzó feroz y la autoestima se encogió hasta un tamaño pírrico, una pregunta tan rutinaria como "¿de qué valencianos te sientes más orgulloso?" cae con estruendo en la mesa de nuestra sociedad civil de cabecera. "Me lo pones difícil", "déjame que piense porque no se me ocurre".

Practicando el orgullo por nuestros referentes. Una veintena de personajes consultados revelan cuáles son sus iconos de hoy. No ya los mejores, sino los que mayor afinidad les generan. Y un ganador: el nombre de Paco Roca es el que más veces se repite.

Paco Roca. Las menciones al dibujante son una constante caídas en racimo mientras se ahonda en las celebridades sentimentales de nuestro entorno. ¿Qué les das, Paco? "Obras que son capaces de reivindicar lo onírico, el olvido de la enfermedad degenerativa o el reconocimiento de los republicanos que liberaron París con la misma fuerza y pasión", dice sobre él Álvaro Pons, doctor en Física y uno de los grandes divulgadores españoles del cómic. "Es un artista que está comprometido socialmente y lo muestra sin problemas utilizando como herramienta lo mejor que sabe hacer", valora la fotógrafa Andrea Invierno. "Es un colaborador incondicional con las causas sociales e hijo predilecto de esta ciudad", describe el Premio Nacional Daniel Nebot. 

El publicitario Jesús Terrés lo certifica: "Tenemos en Valencia a dos inmensos talentos que definen perfectamente a dos generaciones del mundo del cómic: Sento Llobell (Un médico novato; diseñador, también, del Parque Gulliver) y el pequeño gran Paco Roca". En otra de sus cualidades ahonda el fotógrafo García Poveda 'el Flaco': "se ve a la legua que es una buena persona".

Paco Roca es un señor que 'hace' Valencia, sella el diseñador Xavi Calvo: "Pensando en personajes de Valencia de los que me siento orgulloso por su trabajo para la ciudad, creo que él es de los mejores embajadores que tenemos. Reconocido internacionalmente por su trabajo, no ha dudado nunca en exportar Valencia e incluso en ser muy crítico con el despropósito político que llevamos décadas sufriendo. Ha podido irse fuera y no lo ha hecho, le gusta Valencia. Como digo, hace un gran trabajo como ilustrador pero también por Valencia".

Y a partir de aquí, la atomización. Antes del qué, hablemos del quién. ¿Quién se enorgullece de quién?

- Román de la Calle. Para la pintora y Premio Nacional Carmen Calvo, "un ejemplo. Por todos es sabido su buena gestión no solo en el MuVIM, o en la Academia de Bellas Artes". "Me enorgullezco de él por su labor de divulgación", apunta la ilustradora María Herreros.

- Ricard Camarena: "Ejemplifica como pocos la apuesta por el mapa y el territorio. Sus relaciones con sus proveedores generan economía justa. Crea patria. Ha un hecho un esfuerzo por permanecer en su ciudad. Es un cocinero internacional, sin complejos", desgrana la gastroacadémica Cuchita Lluch para explicar su elección. "Si amas la gastronomía tienes que santiguarte cada mañana y dar gracias al cielo por tener aquí mismo (tan cerquita) una cocina que es todas las cocinas -y sin embargo, tan absolutamente nuestra", justifica Jesús Terrés.

- Adela Cortina. "La admiro por liderar la Fundación Etnor, lugar de encuentro y reflexión con el fin de conseguir empresas ciudadanas, insertadas en una sociedad más justa", dice de ella la empresaria Agnès Noguera.

- Faustino Villora: La artista brasileña Bia Santos, contribuidora pionera del hervor cultural valenciano, eleva a Villora a la categoría de referente por "su trabajo realizado frente Salvem El Cabanyal principalmente en los primeros años, donde ha conseguido a través de la pedagogía hacer que los vecinos tomaran conciencia de la importancia de la disciplina, la constancia y la estrategia dentro del movimiento ciudadano".

- Vicente Berenguer: Escogido por Lucas Zaragosí, una de las dos mitades de Siemprevivas. "Un misionero destinado desde hace más de 30 años en Mozambique, y que junto a un pequeño grupo de amigos también valencianos está desarrollando una increíble labor anónima en África y demostrando que tenemos una ciudad y una sociedad comprometida y solidaria".

- Julio Bustamante: El cantante Tórtel pide un momento para aupar a Bustamante como icono de este lugar. "No voy a descubrir a nadie que Julio Bustamente es uno de los mejores hacedores de canciones que ha dado esta ciudad. Una ciudad a la que ama y que le sirve de inagotable fuente de inspiración. València no s'acaba mai es la oda a la chica que desde siempre más le gustó".

- Javier de Lucas: "Un profesor y un catedrático honesto, coherente, luchador", introduce la escritora y guionista Fani Grande. "Javier es fundador del Instituto de Derechos Humanos de Valencia, una institución sin casi presencia en los medios pero que hacen un gran trabajo".

- Pilar Mateo: La misma Fani amplía su selección a la doctora y empresaria Pilar Mateo. "Solo por el hecho de inventar una pintura que frena la malaria ya es suficiente, pero además es una trabajadora inagotable a favor de las mujeres".

- Carmen Alborch: Su desaparición del tablero político valenciano no le ha restado presencia en los recuerdos orgullosos. "Una mujer, que cambió y podría cambiar muchas cosas en esta ciudad", plantea Carmen Calvo. "Gran referente y defensora del movimiento feminista valenciano, siempre ha estado en defensa de la cultura y de los grandes movimientos sociales en Valencia", explica Bia Santos.

- Inma Bermudez: "Joven, creativa, valenciana y única diseñadora española que figura entre los ilustres diseñadores de Ikea". La mujer que enorgullece a Sophie von Schönburg, una de las socias de CuldeSac.

- Pep Gimeno 'Botifarra': Raíz de la tierra, cantautor y recuperador de canciones. El empresario Lluís Planes lo describe: "Ha mandado directamente la cultura popular valenciana de su abuela Otilia de Benigànin y de los mayores, que ha visitado durante años. Dignifica y transmite esa cultura cantándonos las más de mil canciones que se sabe y que lleva atadas al bolsillo con un hilo".

- Benito: Desde Nueva York el galerista Nacho Valle reivindica a aquellos personajes fuera del foco que nos hacen mejores las pequeñas cosas. Como Benito , "el cocinero del Alhambra, que hace esas tortillas de 36 huevos. O Vicente Fabuel de Oldies, esta pequeña tienda de discos es un ejemplo. O como Pep Benlloch, que abrió un galería de fotografía en Valencia en los años 80 e hizo de ella un referente en España".

- Miquel Àngel Landete (Senior): Ondea su nombre el director del cine Pau Martínez. "La admiración que siento por su música va en paralelo a la admiración que siento por él como persona. Su música, en la que muchas veces ha hablado de Valencia, de manera directa o indirecta, me ha servido de inspiración en muchas ocasiones a la hora de preparar proyectos. De hecho sigo luchando por levantar una película con banda sonora suya, El somni s'ha acabat. Arte y militancia política unidos por amor a su tierra, no sé me ocurre mejor aportación."

- Francisco Brines: Otra tanda. Pero de escritores. Al Premio Nacional de Poesía Carlos Marzal le estimula el orgullo la letra de Francisco Brines ("porque es un clásico vivo de la poesía española contemporánea y un maestro de vida"), José Saborit ("un magnífico pintor, escritor y profesor de Bellas Artes, responsable en buena medida del buen estado de salud de la joven pintura valenciana") y el centelleante hombre de les Corts Fernando Delgado ("por ser un espléndido escritor y periodista, y por enseñarnos, con su valencianía de adopción, que hay que ser cosmopolita y ciudadano del mundo, por encima de todo").

Solo unos iconos propios de un territorio donde ojalá cada vez haya más tipos por los que sentir orgullo y menos por los que sentir lo contrario.