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VALENCIA (EP/CP). La 50 Fira del Llibre de Valencia arrancó este miércoles con una clara advertencia ante la piratería, la competencia desleal y la tardanza en el pago de las subvenciones como los principales problema del mundo del libro hoy en día. Pero a pesar de los "obstáculos en el camino", el certamen celebra "medio siglo de vida llenando de libros la ciudad cada primavera" con 81 casetas, nuevos espacios y una amplio programa de actividades muy diversas.

Así lo destacó la directora de la Fira del Libre, Gloria Mañas, durante la inauguración en los Jardines de Viveros de Valencia, junto al presidente del Gremi de Llibrers, David Cases. Al acto asistieron la consellera de Cultura, Maria José Català; la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá; la concejala de Cultura, Mayrén Beneyto; junto a otros representantes políticos de diversos partidos así como personalidades del mundo académico como el rector de la Universitat de València, Esteban Morcillo.

Para Mañas, "ha sido una tarea bien bonita" llevar adelante la Fira del Llibre aunque reconoció que cumplir 50 años "no ha sido fácil". En este sentido, recordó los inicios, los años conocidos como La Batalla de Valencia en los que libreros valencianos y la Fira fueron "centro de los ataques violentos de los intolerantes antidemócratas que hacían estallar bombas en librerías, amenazaban, agredían físicamente, boicoteaban presentaciones de libros, insultaban a los lectores que se acercaban a la Fira y lanzaban escupitajos a los autores e intelectuales". Y "todo por defender el libro y la cultura, la lengua y la identidad de los valencianos", señaló.

Después, vinieron "otros problemas, porque no nos vamos a engañar, el libro y las librerías siempre tenemos problemas: cuando no es porque las subvenciones tardan en pagarse es por la competencia desleal, cuando no se vulnera la ley del comercio es por la piratería".

En este punto lanzó un mensajes a todos los presentes que se consideran "cultos y demócratas" para censurar que algunos "gritan a los cuatro vientos que se bajan libros y contenidos gratis y en la red sin respetar los derechos de autor" impidiendo así a muchos valencianos vivir de su trabajo. Así hizo un llamamiento a los políticos para que comprendan que "el libro y la lectura son herramientas de transmisión de conocimiento". "Es una inversión, nunca un gasto", reivindicó.

En el 50 aniversario de la Fira, Mañas quiso tener un recuerdo especial para dos personas que lucharon por ella e "hicieron de la profesión de librero una razón de vida": Paco Dávila e Isidro Soriano. También mencionó a Pepe Moren y Mario Serrano y a sus compañeros de viaje: l'Associació d'Editors del País Valencià y l'Associació d'Il·lustradors i el Gremi de Llibrers. Por último, quiso recordar que "el libro también está en las librerías los 365 días al año e hizo un llamamiento a la ciudadanía para que leer y convertirse en "ciudadanos libres y responsables".

En esta línea, el presidente del Gremi de Llibrers, David Cases, comentó que la Fira cumple 50 años "con buena salud" pero la "alerta encendida" sin dejar de "reclamar el que es justo". Así se mostró orgulloso de que este encuentro pueda "contribuir a crear ciudadanía más libre, más crítica, más educada y respetuosa".

Desde el plano político, la consellera Català y la alcaldesa Barberá realizaron un recorrido por diversas casetas de la Fira acompañadas del resto de representantes políticos y del mundo de la cultura. Durante el trayecto, se interesaron por la marcha de las librerías, algunos responsables de las cuales les han llegado a pedir "un milagro" para que esta edición y este año vaya mejor que el anterior.

LIBROS, SELFIES Y 'CALORET'

En una de estas paradas, el rector de la Universitat les ha regalado el libro La horchata de chufa de Valencia y Almadraba. Fotos de Joan Fuster. Más adelante, la primera edil regaló a Català un libro sobre la Lonja de Valencia y a Morcillo otro sobre el Impresionismo valenciano. También el coronel Joaquín Gil Peñaranda, delgado de Defensa en la Comunitat Valenciana, hizo unos presentes a todos ellos con un ejemplar del Real d'Alarif. Convento y Palacio de la Capitanía General de Valencia.

Por el camino, tanto la primera edil como la consellera se hicieron selfies con niños y adolescentes que visitaban la Fira y que les pedían instantáneas. Alguno llegó a dirigirse a Barberá para referirse al caloret que mencionó en su discurso de la Crida que da inicio a las Fallas, a lo que la alcaldesa contestó con "el caloret electoral".

Barberá destacó la longevidad de este certamen con la que este año el Ayuntamiento colaborará de manera especial para publicar un libro sobre los 50 años de la Fira del Llibre y animó a los valencianos a visitarla para "introducirse en el mundo de la cultura y la lectura".

Por su parte, la consellera de Cultura subrayó que la Generalitat en los últimos 5 años ha destinado 53,4 millones de euros a fomento de la lectura y ha centrado su objetivo en "transmitir importancia de lectura a los más pequeños". Así, se ha "conseguido que todos los centros educativos tengan su propio plan lector", subrayó.