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VALENCIA (EP/CP). La Fundació per Llibre i la Lectura (FULL), de la que son fundadores l'Associació d'Editors del País Valencià (AEPV) y el Gremi de Llibrers de València, presentaron este martes en el Centre Cultural La Nau de Valencia su Pla Valencià de Foment del Llibre i la Lectura, que tiene como principales objetivos "promover un espacio de reflexión y debate sobre la situación del libro, diseñar las líneas maestras de un Plan Nacional del Libro y la Lectura, como los que ya tienen otras comunidades autónomas, y llevar a cabo actividades formativas.

El acto fue presidido por el vicerrector de Cultura e Igualdad de la Universitat de València, Antoni Ariño; el presidente de FULL y de AEPV, Jesús Figuerola, y el secretario del patronato de FULL, Manel J. M. Romero. Asimismo, contó con la presencia de representantes de la Dirección General de Cultura, como el subdirector general del Libro, Archivos y Bibliotecas, Antoni Peña, y la jefa de servicio del Libro, Archivos y Bibliotecas, María Jesús Carrillo; los escritores y candidatos socialistas a las Corts Valencianes Fernando Delgado y Carmen Amoraga; la secretaría de la Acadèmia Valenciana de la Llengua, Verònica Cantó, así como numerosos editores, libreros, distribuidores y agentes culturales.

Para Figuerola, este plan "nace con la voluntad de ser la semilla de una verdadera política" de promoción del libro y la lectura, "plural y sostenible, consensuada" por todos los actores involucrados en el sector de libro y articulado "por y desde la Generalitat Valenciana, sea quién sea el partido que gobierna". Al respecto, Figuerola señaló que "es responsabilidad de las administraciones públicas impulsar políticas que fomentan el libro y la lectura como herramientas fundamentales del desarrollo de la personalidad y de la socialización", dos elementos que, a su juicio, son "básicos para convivir en democracia y en la sociedad de la información".

FOMENTO DE LA EXPERIENCIA LECTORA

Por su parte, el secretario de patronato de FULL, J. M. Romero, expuso los principales ámbitos de intervención del plan, entre los que destacó el fomento de la experiencia lectora en el sistema educativo valenciano; la promoción de acciones que ponen en valor el libro y la lectura en la sociedad valenciana; el incremento de la presencia del libro en los medios de comunicación; la estimulación de la creatividad de los escritores valencianos y el fortalecimiento de la defensa de los derechos de la propiedad intelectual; así como el desarrollo de un industria editorial propia.

De este último, aseguró que se trata de "uno de los instrumentos más eficaces de fomento de la lectura y estímulo de la creatividad, apoyando a las librerías, fomentando el libro digital y las bibliotecas, y desarrollando los vínculos culturales de la Comunitat en el ámbito nacional e internacional".

Figuerola señaló que los índice de lectura en la Comunitat son "descorazonadores" y recordó que los valencianos "estamos a la cola de todos los indicadores nacional e internacionales". Según datos del 2012 de la Federación de Gremios de Editoras de España (FGEE), el porcentaje de lectores en la autonomía era de 56,8%, mientras que el de media española era de 59,1% y la media europea del 71%.

A LA COLA EN TODO

Por comunidades autónomas con lengua propia, Figuerola destacó que "también estamos a la cola a la hora de comprar libros en valenciano" con el 2%, frente a los datos de Cataluña dónde la compra de libros en catalán es del 28,1%, en Baleares del 12,4%, en gallego en Galicia es de 4,9%, en euskera en el País Vasco es del 5,1%, y en euskera en Navarra de 2,1%.

Figuerola valoró que la actual ratio de librería por habitante como "decepcionante" y explicó que hay una librería por cada 15.304 habitantes, "cerca del 30% por debajo de la ratio nacional". En las bibliotecas, la media de préstamo por habitante y año es de 0'92, mientras la media nacional se sitúa en 1,7 por ciento mientras que la media de documentos por habitante es de 1,4 por habitante, "también por debajo de la media nacional".

Ante estos datos, Figuerola consideró "como una necesidad urgente poner en marcha un plan valenciano de fomento del libro y la lectura", por lo que solicitó "al nuevo gobierno valenciano, sea quién sea el partido que gobierno, poner en marcha un grupo de trabajo que un plazo de seis meses elabore el plan consensuado, con el sector del libro y los agentes implicados". El presidente de FULL instó "a la Generalitat y a todas las instituciones" a "facilitar" a los valencianos el acceso al libro y la lectura por qué, de este modo, "incrementaremos el capital cultural y humano de nuestro pueblo".