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VALENCIA. El Museo Arqueológico de Alicante será la primera sede itinerante que acoja la exposición El último viaje de la Fragata Mercedes a partir del próximo mes de marzo. La exposición ha sido organizada por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, el Ministerio de Defensa y Acción Cultural Española, y se había podido contemplar en el Museo Arqueológico Nacional hasta el pasado 30 de noviembre.

En ella se relata el hundimiento de la fragata Mercedes y las circunstancias políticas y militares que lo rodearon, a través de más de un centenar de piezas seleccionadas para la ocasión. Junto a objetos originales de los siglos XVIII y XIX, se podían contemplar documentos, testimonios de supervivientes y restos arqueológicos, así como recursos audiovisuales, escenografías, reconstrucciones y los modelos a escala. Este compendio pretendía, según sus organizadores, ofrecer al visitante una perspectiva histórica, arqueológica, militar, naval y reconstructiva de la historia de esta embarcación.

Con todo, el protagonismo de la exposición en el MAN recayó sobre una impresionante vitrina en la que se exhibieron 30.144 monedas de plata de ocho reales y 146 de oro de ocho escudos procedentes de la fragata española. Más allá de la mera acumulación, la vitrina rememoraba el cargamento de caudales que transportaba el buque, su distribución en talegas con 1.000 monedas cada una, y la desproporción entre las piezas de oro y las de plata que llevaba.

El hundimiento de la Mercedes representó un punto de inflexión en el transcurso de los acontecimientos políticos y bélicos del momento, pero con su voladura no concluyó su historia. Los restos del buque se hundieron en las aguas del Atlántico, a 1.100 metros de profundidad, pasando a convertirse en un yacimiento arqueológico. Doscientos años después del trágico suceso, la compañía norteamericana "cazatesoros" Odyssey Marine Exploration Inc. localizó los restos de su rico cargamento y en un tiempo record extrajo cerca de 600.000 monedas, que trasladó inmediatamente a Estados Unidos. Junto a las monedas, Odyssey sacó algunos otros restos arqueológicos procedentes del barco.

El Gobierno de España inició un largo proceso judicial que tuvo lugar en Estados Unidos en el que defendió su derecho a los bienes culturales procedentes de la Mercedes frente a la empresa Odyssey. Las pruebas presentadas demostraron ante los tribunales norteamericanos que la identidad del buque expoliado era la Mercedes y, además, que era una fragata de la Armada española, sujeta por tanto al principio de inmunidad soberana, sobre la que Odyssey no tenía ningún derecho a intervenir.

La serie de objetos artísticos, obras literarias y restos arqueológicos que se muestran a lo largo de la exposición revelan la carga histórica que envuelve a este tesoro, a las monedas en litigio. Entre las piezas que se podrán contemplar en ella se encuentra el cuadro de Francis Sartorius sobre la explosión de la Mercedes en el combate del cabo de Santa María el 5 de octubre de 1804, o una maqueta a gran escala de una fragata del tipo de la Mercedes, encargada expresamente al modelista Javier Escudero.

Documentos, un ejemplar de Trafalgar de los Episodios Nacionales de Benito Pérez Galdós donde se relata el combate en el que naufraga la Mercedes, retratos, mapas, todos son parte de una muestra que llega con la vitola de haber sido un éxito. Durante los meses que se exhibió en Madrid congregó a más de 180.000 visitantes. Ahora inicia su gira por España desde el MARQ de Alicante. Es su nuevo viaje; el último.