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VALENCIA. Hoy se cumplen exactamente 80 días desde que Ana Patricia Botín asumiera el cargo de presidenta del Banco Santander tras el repentino fallecimiento de su padre. Fue el pasado 10 de septiembre y desde entonces el llamado 'banco rojo' sufre una especie de catarsis bajo el mando de la hija mayor de Emilio Botín, cuyo nombramiento no causó gran sorpresa dado que era la elegida por su padre y de ahí que la fuera curtiendo en sus destinos.

Pero lo que sí está sorprendiendo -y mucho- son las decisiones que ha venido adoptando y, sin duda, la de mayor calado fue tomada esta misma semana, concretamente el miércoles, cuando Ana Patricia revolucionó la entidad cambiando al consejero delegado Javier Marín.

O lo que es lo mismo, el que fuera durante tantos años brazo derecho de su padre, que accedió al cargo tras la marcha de Alfredo Sáenz, cuyo cargo lo ocupa ya José Antonio Álvarez.

ADIÓS A LOS HISTÓRICOS

Pero la cosa no quedó ahí porque también han salido del consejo de administración dos históricos como Fernando de Asúa y el exministro Abel Matutes.

Por su parte, han entrado otros procedentes del Santander UK como Bruce Carnegie-Brown y Jacques Ripoll, que tan bien conoce de su paso -y al frente- de la división inglesa.

Toda una declaración de intenciones para los ejecutivos de la 'vieja guardia' del patriarca de la entidad de origen cántabro, que todavía quedan entre los primeros escalafones y están con la mosca tras la oreja ante lo que pueda pasar.

DISOLUCIÓN DEL CONSEJO INTERNACIONAL... POR RATO

Una de las primeras decisiones que adoptó Ana Patricia fue la disolución del Consejo Asesor Internacional del Banco Santander creado por su padre donde estaba presente el exministro y expresidente de Bankia, Rodrigo Rato. La entidad decidió reconfigurar las relaciones de asesoramiento que tiene institucionalizadas "a la luz de los cambios que se han producido en la situación global y que van a continuar en la próxima década".

Pero pocos dudan que detrás de dicha medida estaba el 'affaire' de las tarjetas de Caja Madrid donde Rato ha sido imputado por el juez Fernando Andreu.

EL 1,76% TAE

Pero todavía quedaba otra sorpresa y de las gordas... sobre todo para el Banco de España: el lanzamiento de 'Cuenta Corriente Súper Rentabilidad' en Cataluña con un TAE anual del 1,76%.

Un tipo de interés muy superior a las directrices marcadas por el gobernador Luis María Linde a primeros de 2013 y que acabó con los llamados 'superdepósitos'. Conviene recordar que la institución reguladora 'recomendaba' no ofrecer rentabilidades superiores al 1,75% en los depósitos de menos o igual a un año, el 2,25% para los de dos y el 2,75% para los de tres años.

Pero a Ana Patricia Botín no le ha temblado la mano con el fin de ganar cuota de mercado en Cataluña, dado que se trata de una de las regiones en las que tiene una cuota más baja respecto al resto de España. Hay que tener en cuenta que BBVA adquirió recientemente Catalunya Banc (CX), con una gran presencia en la comunidad catalana después de absorber Unnim.

OFENSIVA COMERCIAL EN CATALUÑA

Banco Santander lanza esta ofensiva comercial en Cataluña -y que no descarta hacerlo al resto de España- una vez celebrados los test de estrés a la banca -obtuvo un 8,9% de ratio en las condiciones más adversas teniendo en cuenta que es uno de los pocos bancos sistémicos europeos con lo que se le exige más-, que han puesto punto y final a la etapa de saneamiento y reforzamiento de la solvencia de las entidades españolas.

Ahora se abre un nuevo periodo orientado al crecimiento y la mayor competencia; pero sin olvidar que el caso del SAN viene respaldado por unos resultados a prueba de bombas.

UN 32% MÁS

De hecho, la entidad elevó su beneficio un 32% en los nueve primeros meses del año hasta totalizar los 4.361 millones de euros.

La propia Ana Patricia Ana Botín subrayó que el crecimiento del beneficio consolida la recuperación de los resultados, apoyada en la mejora de los ingresos, el descenso de los costes y las menores necesidades de saneamientos.

Mientras tanto la cotización del 'banco rojo' se deja en el camino un 7% desde su nombramiento como máxima responsable, una fuerte caída que contrasta con la del 2% del Ibex 35... aunque el BBVA se ha dejado en el mismo periodo algo más del 10%.